La diputada provincial, de las primeras defensoras de Pedro Sánchez, mamó desde niña los valores socialistas, ecologistas y feministas
12 sep 2019 . Actualizado a las 18:10 h.Sonsoles López Izquierdo mamó desde pequeña el socialismo, el ecologismo y el feminismo. Sus padres, Sonsoles y José Ramón, fueron de los primeros socialistas que pusieron a andar la maquinaria electoral con la llegada de la democracia. Su madre fue la primera mujer que dirigió una agrupación del PSOE en Galicia, la de Lugo, donde fue concejala en 1979, además de ser la cabeza visible del colectivo ecologista Aldeltha y, con su marido, fundadores de la Protectora de Animales. «Lembro ir de nena no coche cos meus pais lanzando papeletas ou chegando a unha vila e preguntar na gasolineira ‘onde está a casa do roxo’?», explica Sonsoles, quien también tiene marcada la historia de su abuelo Celso, «escapado» en la sierra de Meira por ser de izquierdas.
Con este bagaje familiar sería imposible que Sonsoles no acabase militando en el PSOE -siendo, aunque ella se ríe, la más roja del gobierno de Campos en la Diputación-, no dedicase su formación y su camino profesional al sector forestal y ganadero, no fuese feminista y no compartiese valores ecologistas y animalistas.
Precisamente de valores habla cuando analiza la situación política actual con respecto a la que vivieron sus padres: «Hai unha perda de valores importante, a dereita legalizou a mentira, a calumnia e o desprezo aos que pensan diferente», y defiende una política de «convivencia, de empatizar co adversario e de xustiza social». El mismo discurso de Pedro Sánchez, de quien Sonsoles fue una ferviente defensora desde que el presidente del Gobierno optó a liderar el partido.
Por este motivo, la candidata lucense afirma que se decidió a dar el paso a ir en la lista al Congreso. «Creo que con toda a experiencia municipal e de xestión na Deputación estou preparada para ir no proxecto de Pedro Sánchez, creo nel», explica Sonsoles, que a su pesar se vio envuelta en la polémica cuando fue propuesta por la dirección del partido en Lugo, en base a la consulta a los militantes, como número uno en la lista. Finalmente, un pacto entre Ferraz y Santiago la relegó al segundo lugar: «Houbo unha falta de entendemento entre o que é un proceso de primarias e unha consulta, e xerouse unha expectativa e logo foi algo decepcionante, pero agora loitamos por conseguir os mellores resultados. Eu vou ser socialista vaia ou no na lista», explica, agradeciendo la confianza que tuvo y tiene del secretario provincial, Álvaro Santos.
Por su gestión en la Diputación, primero en el área de medio ambiente y luego en bienestar social, considera que la ecología, el desarrollo de la producción agraria y los servicios sociales son espacios, todos ellos vinculados con el turismo, con un gran futuro económico y una oportunidad para el desarrollo del rural lucense. «Hai que poñerse en serio co despoboamento, porque non podemos existir sen o mundo rural e ten máis custes que estea abandonado que telo en produtivo». Sonsoles habla de políticas fiscales, de refuerzo de la PAC, de aprovechar las oportunidades que supone estar en Red Natura o de contar con reservas de la biosfera como ejemplo para conseguir «un medio rural no que se pode vivir da produción agrogandeira e forestal, pero non dun xeito expansivo, senón con calidade». Su vena profesional sale precisamente para hablar de oportunidades para el rural, ella que pertenece a una generación que por una parte se formó en los albores del campus de Lugo y, por otra, tuvo que emigrar por falta de oportunidades en Galicia.
La otra pata del futuro económico que ha vivido en los últimos años es la social, con visitas a decenas de colectivos lucenses: «Impresionoume a cantidades de servizos básicos que desenvolven e que senón é polas subvencións nominativas da Deputación, quen faría ese traballo? A Xunta, que ten as competencias, non o fai».
Lugo, 1974. Casada y con dos hijas.
Ingeniera Técnica Forestal en la Escola Politécnica. Ejerció como ingeniera en varias empresas y administraciones.
Edila en Paradela desde el 2007 y diputada provincial desde el 2011, llevando las áreas de medio ambiente y bienestar social.
«Non podemos vivir sen o mundo rural, e ademais ten máis custes que estea abandonado que aplicar políticas para que sexa produtivo»