Emprendedores instalados en A Tinería cuentan las expectativas que tienen en las calles del casco histórico
10 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Una puerta y una ventana brillantes y recién pintadas esconden en la calle de la Tinería un taller-tienda en el que las tijeras y la aguja de Sara Lage hacen magia. Hace apenas unas semanas que la diseñadora trasladó su taller al barrio, pero no puede estar más feliz. «¡É o barrio máis bonito de Lugo!», proclama a quien la quiera escuchar mientras da forma a sus exclusivas creaciones nupciales.
Ella es una de las emprendedoras que ha apostado por instalarse en una zona que está dejando atrás los tiempos oscuros en los que el barrio solo se vinculaba con prostitución y malos modos. A Tinería se está abriendo a Lugo, y Lugo a A Tinería. «Eu levo aquí dous anos e xa se percibe o cambio. E os que estaban antes de min aínda o notaron máis, por iso sentín o atractivo de instalarme neste lugar. Isto é un proxecto a medio ou longo prazo, pero cos novos negocios vai collendo forma», analiza Alberto Curiel. Un obrador y tienda de cerveza artesanal de la que salen un millar de litros cada mes es su apuesta personal y un negocio cuyo reto es seguir creciendo.
Isa, la cara sonriente que se esconde tras las botellas de Vinissi, es de las que tiene fe ciega en el barrio. «Sempre crin no potencial da Tinería, nós levamos un ano instalados aquí e percibimos que a xente cada vez se anima máis a baixar, aínda que non está de máis lembrarlles que somos unha alternativa», cuenta. La piedra y la luz conviven en la tienda vinoteca desde la que intenta dinamizar el mundo del vino. Es una emprendedora, lo mismo que Lidia de la Fuente.
Una coqueta casita de dos plantas y con un balcón privilegiado es el lugar que ocupa el negocio de Lidia en el barrio. Camiños con arte es la empresa de visitas guiadas que puso en marcha en el 2016 y que en este 2019 ha estrenado oficinas. En su mente y en sus manos bullen los proyectos. Cuando no se encuentra presumiendo de Galicia ante grupos de turistas se la puede encontrar en un local que hizo suyo desde el primer momento y en el que las guías, los mapas y los libros conviven con las plantas en un lugar que transpira encanto.
«Dispoñer do local dá máis visibilidade ao negocio», señala Puri Juanes, impulsora de Recados Lugo, una emprendedora cuyo fin es «sacar de apuros á xente e conseguir que teñas tempo para ti mesmo». Una meta en la que ahonda desde un barrio en el que los ritmos están alterándose. «A nosa chegada estalle cambiando a cara á Tinería, as reformas que se fixeron nos edificios, o movemento da xente, todo está transformándose», cuenta.
El buque insignia del Breogán
Cuando el Concello de Lugo puso en alquiler ocho locales comerciales, el Breogán quiso dar el salto a la calle a través de un espacio que se situará en la Rúa do Miño. «Nela estará a tenda, oficinas e, se todo avanza ben, incluso un xardín no que se poderían facer recepcións», detalla Suso Lázare, presidente del club. Su proyecto está llamado a servir de locomotora comercial a la zona, pero todavía tendrá que esperar. Al poco de comenzar los trabajos de reforma del local detectaron que la cloaca romana de la ciudad se encontraba bajo sus pies, por lo que ahora están a la espera de que las entidades competentes les detallen los pasos a seguir.
Al lado del Breogán se instalará en pocos días Unha de Romanos, la ventana a la historia que María Lamela y Teté Latas abrieron a través de los tejidos y la ropa. «Entre todos podemos visualizar o barrio», dice María en vísperas de que su nuevo espacio abra sus puertas. En él no solo dispondrán de tienda, sino que lo abrirán también a talleres y muestras y a un proyecto global de recreación histórica. Quieren poner en valor los tejidos igual que se pretende poner en valor A Tinería, donde también Bruno Castro está ultimando su negocio de tienda de telefonía y reparación. «É como unha asesoría tecnolóxica», describe el fundador de Librephone. «Aquí estamos chegando bastante xente nova e de todos os sectores, e iso dálle un plus ao barrio, unha compañía tira pola outra». Todos ellos son solo una muestra del tejido emprendedor que está renovando el barrio.
Moda, hostelería, recreación histórica o móviles son sectores que conviven en la zona
El Concello rehabilitará para fines sociales el local que quedó sin asignar
En marzo del 2018 el Concello de Lugo y la Xunta firmaron los contratos de alquiler de nueve locales comerciales que la administración autonómica tenía en propiedad y había rehabilitado. Estaban en las calles Miño, Tinería, Praciña da Universidade y Recanto do Miño. El equipo de gobierno de Lara Méndez los subarrendó a su vez por precios asequibles durante cuatro años a las empresas que los solicitaron, pero uno de ellos, el situado en el número 44 de la Tinería, quedó desierto.
El Concello ha decidido que será la propia administración local la que se encargará de habilitarlo con fondos municipales de forma inmediata. La intención es que el espacio se reserve así para uso de asociaciones y colectivos y redunde en la dinamización del barrio.
Los espacios comerciales son un punto importante de la renovación que está experimentando A Tinería, pero hay más iniciativas en marcha. En los orzamentos participativos del Concello se aprobó un plan de acción para transformar la zona que está en plena fase de estudio. Todo empuja para que el barrio florezca de nuevo. Todos serán necesarios, administraciones y la propia sociedad.