Incluyen el cubo que albergó un transformador a la altura del instituto Xoán Montes
03 nov 2018 . Actualizado a las 20:34 h.La consolidación y rehabilitación de la Muralla romana está a punto de entrar en una nueva fase, siguiendo los planes ya expuestos por la Xunta. El Gobierno autonómico acaba de sacar a licitación obras en el monumento por importe de 602.000 euros, desglosados en dos paquetes. Uno de los proyectos cuya ejecución se tramita afecta al cubo número 7, a la altura del cierre del patio del instituto Xoán Montes por el lado del canil.
El cubo número 7 albergó en su interior un transformador eléctrico, retirado hace ya tiempo. Ahora está previsto desmontar la estructura de hormigón usada en la etapa en la que estuvo allí el centro de transformación. También será desmontada la parte eléctrica que aún se conserva y se efectuará una excavación arqueológica en área.
Este cubo tiene también un punto de interés en el arco cegado que se aprecia en el paramento interior; corresponde a un espacio interior abovedado, cuya finalidad podría quedar aclarada al hilo de las próximas obras.
Los trabajos que salen a licitación incluyen, además de la recuperación del espacio ocupado por el transformador, una intervención en el adarve para evitar filtraciones de agua y corregir las grietas verticales. Como es habitual, se efectuarán excavaciones arqueológicas previas en el adarve. Está prevista la instalación de una lámina geotextil, como ya se hizo en otros cubos, para mejorar la protección de los elementos interiores del monumento, entre ellos, la escalera.
La intervención afectará igualmente a una franja de unos dos metros del jardín exterior. Está previsto excavar hasta alcanzar la cota original, la romana. Durante los trabajos se llevará a cabo un levantamiento topográfico en 3D de las estructuras romanas que aparezcan.
El presupuesto de licitación de las obras en este cubo asciende a 324.000 euros.
Reparaciones
Por otro lado, en lo que atañe al contrato de mantenimiento de la Muralla, el objetivo es la ejecución de obras de conservación de los lienzos, tanto exteriores como interiores, así como del adarve y de las escaleras. Igualmente, tiene por objetivo solventar incidencias que requieran reparación de solados, fábricas y albardillas. Uno de los apartados a los que se refiere es a la eliminación de la vegetación, que se efectúa de modo manual. Desde 1997 se desarrollaron distintos proyectos en colaboración con la Universidade de Santiago para el control fitosanitario del monumento. Precisamente, uno de los objetivos del contrato que acaba de salir a licitación será el de testar, sobre una superficie mayor de la utilizada hasta ahora, la eficacia de los bioherbicidas.
Como ocurre en la licitación de casi toda obra pública, también en este caso el representante de la Administración que tramita la contratación, la Xunta, aprovechó la ocasión para lanzar el correspondiente mensaje político.
Compromiso
El delegado territorial de la Xunta, José Manuel Balseiro, señaló:
«Unha vez máis ponse de manifesto o compromiso da Xunta co patrimonio cultural de Lugo e, en concreto, coa Muralla romana, na que se suceden os investimentos encamiñados a garantir a súa protección e integridade, acorde coa súa condición de Patrimonio Mundial»
. Las empresas interesadas en ejecutar las obras licitadas tienen hasta el próximo día 28 para presentar sus ofertas.