«Temos medo de que nos mate un coche porque pasan a 100 por un sitio de 50»

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

ALBERTO LÓPEZ

Un grupo de vecinos reclama al Concello que ponga un badén para frenar a los vehículos antes de un paso peatonal

29 oct 2018 . Actualizado a las 00:27 h.

Vecinos del inicio de la Calzada das Gándaras, en el entronque con Serra de Meira presagian una desgracia si el Concello de Lugo no toma cartas en el asunto. «Temos moito medo a que nos mate un coche porque baixan polo menos a 100, cando a velocidade está limitada a 50», dijo ayer una vecina del lugar que ya en otras ocasiones denunció públicamente la situación deficiente en la que se encuentra este barrio.

Los vecinos dicen que tienen un paso de peatones trampa o ratonera. No les falta razón. Es el último según se baja de As Gándaras hacia el centro de la ciudad. Tiene una deficiente señalización y, además, los afectados reclaman que le pongan unos metros antes unos badenes que hagan frenar la marcha de los coches. Efectivamente, muchos vehículos pasan por el lugar a una macha que supera ampliamente los 50 kilómetros que están establecidos en la zona.

A ese fatídico paso de peatones se le añade otro problema: la existencia de los contenedores de vidrio y basura impide ver con la máxima garantía los vehículos que descienden hacia el centro. Un mínimo despiste supone un riesgo muy grave.

Un chequeo a la calle, realizado ayer a instancia de los vecinos afectados, revela la mala señalización y el grave riesgo. Se da la paradoja de que existe una marca horizontal de limitación de 50 kilómetros por hora una vez traspasado el paso cebra pero en la dirección de subida. No hay esa señalización de bajada, que es cuando los vehículos alcanzan una mayor velocidad.

Al principio de la calzada, en su parte alta, efectivamente existe una señal que limita la velocidad a 50 kilómetros por hora, sin embargo no se vuelve a recordar más a los conductores a pesar del vial, ni con señalización horizontal ni vertical. A mayores, existen varios pasos de peatones en el tramo y un par de badenes para hacer reducir la velocidad a los conductores, pero el principal tramo en descenso está libre totalmente.

Los vecinos están alarmados por la falta de seguridad. Recuerdan que no solo son ellos quienes utilizan el polémico paso de peatones, sino también escolares que van al colegio del Sagrado Corazón que se encuentra en la zona.

«Mire, chegan a baixar a tal velocidade que xa máis dun coche acabou dando “trompos” e encaixándose cunha das glorietas de enlace para a avenida Duquesa de Lugo», dijo un vecino. Otro contó lo ocurrido uno de estos últimos días de madrugada cuando un turismo subió a la acera, dejó restos de piezas en la calzada y siguió el recorrido.

«Eu cando estou na casa e escoito freadas xa me preparo para o golpe porque sei que vai pasar algo», explicó otro de los vecinos del lugar. Contaron también que en algunas ocasiones tuvieron que llamar a la Policía Local para que interviniese. «É verdade que non tardan moito en aparecer, pero eles pouco poden facer se non se toman outras medidas, como poden ser unha mellor sinalización, que podería ser incluso de sinais verticais ou semáforos que se puxeran en vermello en caso de que a velocidade superase os límites establecidos».

Varios vecinos dicen que hay conductores que usan la calle para hacer trompos