Una chatarrería lucense compitió con una de Leganés por el lote de 56 vehículos que nadie recogió
11 jul 2018 . Actualizado a las 20:26 h.Dos Audi A4 por 105 euros cada uno; un par de Mercedes de la serie 220 y 300, por lo mismo... Esos fueron los precios medios que el Concello de Lugo estableció para deshacerse de vehículos de alta gama que fueron abandonados y que, transcurridos ya bastantes meses jamás fueron reclamados. Ojo, que hay letra pequeña y mucha: esos coches no podían ser adquiridos por separados y su destino era la chatarra. Finalmente compitieron por el lote, formado por 56 vehículos, una chatarrería de Lugo y otra de Leganés (Madrid). Pagó más la ubicada en el polígono industrial de O Ceao y se quedó con la mercancía.
Vehículos de diferentes marcas, modelos y cilindradas quedan, con relativa frecuencia abandonados en las calles de la ciudad o incluso en el depósito municipal de la grúa al que son llevados en espera de que sus dueños paguen multas, tasas o simplemente la tasa del almacenamiento. Ocurre, también con cierta asiduidad, que los dueños optan por el abandono definitivo porque no les compensa pagar las cantidades que adeudan. Puede salir por un pico tener que pagar una multa, la grúa y después el depósito. Eso conlleva que numeras unidades se queden huérfanas.
Hubo momentos en los que el Concello les ponía un precio a cada una y luego salían a subasta. Sin embargo en la última «poxa» promovida por la institución municipal, el Concello fue directo al grano: lote completo, precio por tonelada y asunto resuelto.
En esta ocasión había un total de 56 vehículos. Dos eran Audi A4 y otro 80; tres, Mercedes (uno de ellos una furgoneta; un Golf, un BMW... Algunos ni tan siguiera disponían de matrícula.
Para establecer un precio por toda la mercancía, el servicio municipal correspondiente pidió un informe al oficial conductor del parque móvil municipal el pasado mes de marzo. El empleado estableció que el precio de salida del lote debía fijarse en 70 euros por tonelada. El peso total del conjunto fue calculado en 96 toneladas por lo que el precio establecido para participar en la subasta fue de 6.720 euros.
Últimamente no anda fino el Concello con las subastas. Un ejemplo, las del pulpo. Pierde dinero y, encima, algunos hosteleros se presentan con el nombre de varias empresas, ofertan a la baja y finalmente van renunciando hasta conseguir sacar el lote a un precio mucho más reducido. Pero en la chatarra, no; en la chatarra la institución municipal recaudó más de lo previsto.
Para optar a los coches únicamente compitieron dos chatarrerías: Desguaces Herbón, de Lugo y Grupo de Blas, con base en Leganés. Los primeros casi duplicaron el precio de salida ya que presentaron una oferta de 11.201 euros; los segundos se quedaron en 10.656. Los coches, por tanto, se quedan en O Ceao. Las piezas aprovechables serán puestas a la venta antes de ser definitivamente destrozados.
Varios expertos indicaron que el peso medio de los vehículos de alta gama se situaba aproximadamente en 1.500 kilos, lo que según el precio inicial pedido por el Concello en el proceso de la subasta, cada unidad podía oscilar entre los 105 y los 150 euros, aproximadamente.