Lugo se queda otro año sin playa fluvial en medio de la pugna entre PP y PSOE

Enrique Gómez Souto
Enrique G. Souto LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

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La Xunta reclama nuevos estudios al Concello y alguno solo se puede efectuar en estiaje

23 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

En política y, por tanto, en las relaciones entre instituciones de distinto signo, cada parte hace su propia interpretación y maneja los datos según sus propios intereses. En el caso de la grouchiana historia de la zona de baño pública (ni siquiera una playa fluvial propiamente dicha) en el Miño, las batallas entre PP y PSOE tienen un peso decisivo. Ayer, el propio gobierno local admitió que las nuevas exigencias la dirección xeral de Conservación da Natureza hacen casi imposible que Lugo cuente este verano con dicho servicio.

El concejal de Desenvolvemento Sostible, Daniel Piñeiro, relató los requisitos que acaba de exigir la Xunta para el área de baño. Por un lado, una batimetría efectuada en época de estiaje; asegura que la ya presentada por el Concello fue realizada con caudales de estiaje, tal y como se indica en el propio documento que fue entregado, en concreto, el 18 de octubre de 2016. Otro de los requisitos demandados es un plan de contingencia para la retirada de las estructuras flotantes ante una crecida repentina del río, plan, aseguró Piñeiro, al que nunca antes habían hecho mención. A este respecto, explicó que los pantalanes se instalarán en verano, meses de bajo caudal. Manifestó también que en los planos aparece detallados el sistema de contención y los anclajes de hormigón de que disponen las estructuras previstas.

Otra de las exigencias es un plan de contingencia de retirada de residuos, al que, siempre según Piñeiro, tampoco se hizo referencia anteriormente. Afirma que se indicó que la retirada de residuos se efectuaría a través de gestores autorizados.

La Xunta también reclama un muestrario de las especies de fauna y flora existentes en la zona susceptibles de protección; esta muestra tiene que ser realizada en época de estiaje. Daniel Piñeiro sostiene que antes no fue solicitada y que el Ayuntamiento ya detalló posibles afectaciones a hábitats y especies y las medidas de protección Este requisito supone realmente, en opinión del gobierno local, que Lugo no podrá contar este verano con área pública de baño en el Miño, porque el muestreo debe realizarse en época de estiaje y resulta imposible, sostiene el equipo de Lara Méndez, saber a día de hoy cuándo se darán esas condiciones en el caudal o si llegarán a producirse. Sobre este último requisito, Piñeiro espera que sea aplicado también en casos como el de la mina de Touro.

Envío de documentación

El Concello enviará la documentación solicitada, y ello porque quiere «facer unha área de baño accesible no Miño, iso nos dará valor como cidade e é un dereito da cidadanía e mesmo do propio río, pois canto máis o valoremos máis o vamos a querer e protexer».

El mismo edil socialista cargó contra el delegado de la Xunta en Lugo. «A diario, o que se converteu xa no voceiro de facto do PP neste Concello, Balseiro, aproveita a máis mínima ocasión para facer oposición dende a Xunta a este goberno, sen escatimar para elo a manipulación».

El socialista Daniel Piñeiro lanzó un puyazo a los gobiernos pilotados por los populares: «Non só non fan, e non só tratan de tapar a súa deixadez cargando contra o Concello, senón que non deixa facer: poñen todos os medios ao seu alcance, utilizando de maneira partidista as institucións, para torpedear a quen de verdade, como fai este goberno, traballa por Lugo».

Ameijide: «Os que torpedearon o proxecto foron os gobernos socialistas»

El portavoz municipal, Antonio Ameijide, devolvió la pelota de las críticas al terreno del gobierno local. Declaró: «Non se entende que se boten agora as mans á cabeza e culpen a outros de que en Lugo non haxa praia fluvial, cando foron encadeando erros en cada trámite e, incluso, nos últimos meses se obviou un informe do Servizo de Conservación da Natureza no que lles pedían corrixir seis aspectos fundamentais, dos que só solucionaron un». Añadió: «Os únicos que torpedearon o proxecto da praia fluvial para Lugo foron os gobernos socialistas e, nos últimos tres anos, foi Lara Méndez a encargada de que Lugo sexa a única cidade na que non podemos desfrutar do noso río».

Del proyecto, Ameijide opinó que «é tan pobre que nin o dotaron de aparcadoiros públicos, esqueceron os accesos para discapacitados, dotar a zona de vestiarios, baños públicos ou unha cafetería ou un posto de venda de bebida e comida».