Denuncian el acoso de un vecino y la parálisis del Concello para crear un refugio de animales

TANIA TABOADA LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

ALBERTO LÓPEZ

Dos representantes de una asociación de Lugo critican las trabas que les ponen para cuidar perros abandonados

22 may 2018 . Actualizado a las 08:09 h.

Solas y desamparadas por la administración local, acosadas por un vecino que aseguran que les hace la vida imposible y desesperadas por la cantidad de denuncias «injustas» que este les interpone día tras día. Así se sienten Isabel y María, las máximas responsables de la Asociación LEDA, un colectivo sin ánimo de lucro que se constituyó como primera asociación legal de Lugo hace más de un año y cuyo objetivo fue la recogida de perros abandonados.

Tras constituirse como asociación, ambas lucenses alquilaron una finca particular en la parroquia lucense de San Pedro de Romeán para albergar al máximo número de perros (actualmente tienen nueve) y fue ahí cuando empezaron todos los problemas. La denuncia del vecino por ruidos y olores en todos los organismos desencadenó en una orden de paralización por parte del Concello. «Venimos para aquí, nos presentamos a los vecinos y en un principio todo bien, pero al poco empezó a denunciarnos por supuestos ruidos y olores. Pasado un mes de estar aquí nos llamaron de noche porque habían roto la cancilla y soltado los perros a la carretera. Pensamos que fuera un acto vandálico pero pasaron otros dos meses y volvió a suceder lo mismo. Y así siete veces. Pusimos cámaras de vigilancia pero entraron de noche y se llevaron el cuadro de la luz, toda la instalación eléctrica, cámaras, grabador... Después aparecieron los candados pegados con pegamento y así numerosos desperfectos», indican estas responsables, que sospechan del vecino pero dicen no tener pruebas.

Medición de los ruidos

Según explican, en dos ocasiones se presentó en la zona la Policía para hacer la medición de ruidos con las ventanas abiertas de la casa del vecino y dio muy por debajo de lo permitido, pero al haber una denuncia de por medio todo continúa parado. «Empezamos a construir sin pedir licencia ni permiso en base a un proyecto legal. Pero es que la mayoría de las asociaciones y protectoras están ilegales. Construimos esta casita y cuatro caniles y al existir denuncia por medio, el ayuntamiento nos tiene todo paralizado. Fuimos a pedir licencia de actividad y legalización de las obras hace más de dos meses pero no tenemos respuesta. El problema gordo viene porque no nos dan licencia de actividad porque no nos pueden legalizar los cuatro caniles ya que al ser asociación y tener más de cinco perros obligan a solicitar núcleo zoológico y tienes que tener fosa séptica y agua. Nosotros no podemos construirla porque no tenemos licencia», explican las máximas representantes de LEDA, que añaden que si no fuera por el vecino que las denunció no tendrían estos problemas.

Según relatan, el Concello les envió una carta notificando el cese de actividad pero ellas se niegan a irse y dejar a los perros abandonados. Tampoco tienen agua porque no pueden construir la bomba en un pozo existente en la finca por la orden de paralización. Esto hace que transporten el agua en garrafas y a mano. «Entre el vecino por un lado y el Concello por otro, esto es una desesperación. Cada vez que este hombre llama a Comisaría diciendo que estamos aquí y esta viene, nos cae una multa», relatan estas lucenses, que llevan 1.601 euros en multas.

Ambas piden al Concello agilidad para que les de licencia y así poder llevar a cabo un refugio que nace para el bien de la sociedad.