La Xunta únicamente se hará cargo de la de autocares, que dejará su céntrica ubicación
24 feb 2018 . Actualizado a las 20:57 h.De la futura estación intermodal de Lugo, únicamente se sabe a medias. La Xunta se ocupará de hacer la de autobuses, que tendrá un coste de 6,3 millones de euros, pero de la de tren (de la que se encargará ADIF) nada se sabe. Únicamente, que ambos servicios estarán conectados. Todo apunta a que el histórico edificio de la terminal ferroviaria del que en su día se denominó Barranco de Friás, seguirá sirviendo como instalación principal para los viajeros. De hecho, el estudio que hizo la Xunta, no especifica el uso que le darán al mismo. Será ADIF quien tenga que decidirlo.
El centro de la ciudad perderá su estación de autobuses. Los viajeros irán a la zona de la estación del tren y desde allí tendrán que moverse en bus urbano.
La conselleira de Infraestructuras Ethel Vázquez presentó ayer los estudios técnicos previos a la construcción del nuevo servicio en una concurrida conferencia de prensa en la que también intervino el responsable del trabajo y el delegado de la Xunta en Lugo. La futura estación de autobuses costará 6,3 millones de euros y está pensada para que facilite más de 60.000 transbordos «cando chegue o Ave a Lugo». Tanto la conselleira como el autor del estudio mantienen que el tren de velocidad llegará a la capital, pero no se sabe cuándo.
Antes de decidir la ubicación de la estación (irá en los terrenos en los que hay vías muertas y almacenes de ADIF) fueron estudiados hasta siete posibles emplazamientos, según dijo la conselleira. Todos ellos están situados en las inmediaciones del actual emplazamiento.
Los estudios que hizo la Xunta, dijo la conselleira, tuvieron en cuenta la oferta y la demanda de transporte público en Lugo, desde las líneas de autobús urbano, además de las características de la infraestructura de los servicios de tren y de otros como el taxi y la bicicleta.
«Ademais, realizáronse conteos de pasaxeiros que permitiron concluír que preto de 60.000 viaxeiros por ano se verán beneficiados polas dúas estacións, apostando pola intermodalidade, por unha viaxe combinada entre tren e autobús». Los cálculos de los 60.000 viajeros están pensados sin conocer cuántos trenes llegarán en el futuro a la capital lucense. Actualmente hay trece salidas y llegadas de lunes a viernes. De acuerdo con el informe, el tren estaría moviendo un total de 70.000 pasajeros al año frente al medio millón que pasan por la céntrica estación que actualmente está operativa desde los años setenta y cuya cuenta atrás parece haber comenzado.
El edificio
El nuevo edificio tendrá 420 metros cuadrados. Dispondrá de viales de conexión, un acceso en el que se permitirá parar momentáneamente a aquellos vehículos que lleven pasajeros o los vayan a recoger, al estilo de cualquier aeropuerto. Dispondrá de una parada de autobús urbano por la que pasarán cinco líneas. No está claro que la parada vaya en la misma terminal. El autor del estudio dijo que podrían estar nun radio de entre cero y dos minutos caminando.
En la presentación de ayer también contaron que la obra será compatible con el PXOM y el estudio de detalle de Ponte Romai. A la hora de definir el tráfico, habrá una separación de buses y vehículos ligeros y tratarán de garantizar la máxima seguridad para los peatones.
«As maquetas aguantan todo», dice la conselleira sobre los más de 700.000 euros tirados en el viejo proyecto
Casi 800.000 euros de fondos públicos invertidos hace unos años en la redacción del proyecto básico y de construcción de la intermodal fueron tirados. Los gastó el Ministerio de Fomento siendo su titular el socialista lucense José Blanco. Ese proyecto, que arquitectónicamente recibió varios premios no es aprovechado y nuevamente dinero público vuelve a ser gastado en algo que ya estaba hecho.
Esta cuestión le fue trasladada ayer a la conselleira de Infraestructuras. Ethel Vázquez recordó a quienes acudieron a su rueda de prensa que «a mellor intermodal é a que se pode realizar». «Quen pense ?añadió? que a mellor é a máis faraónica está equivocado. No é mellor o que máis costa». El delegado en Lugo de la Xunta José Manuel Balseiro incluso recordó que echando cuentas, lo que gastó el PSOE en su momento fue diez veces más de lo que ahora destina la Xunta.
La conselleira recordó que el proyecto de su departamento llega avalado de un estudio minucioso que no llegó a hacerse antes. En este sentido recordó que un proyecto como este no pasa solo por la cuestión arquitectónica sino que tiene detrás una serie de estudios para determinar que es viable y que su funcionamiento es posible.
Los técnicos que, al parecer, analizaron el proyecto de los más de 700.000 euros, le encontraron defectos considerables, incluso en lo que a seguridad respecta, recordó la conselleira que volvió a recordar: «A mellor intermodal é a que se pode realizar porque hai que ter en conta que o papel e as maquetas aguantan todo. Pero poñerse a facer o proxecto con máquinas escavadoras sobre o terreo é outra cousa».
¿Y los 780.000 euros? «Haberá que pedirlle responsabilidades a quen fixo a contratación», explicó la conselleira. A su equipo la cantidad citada le parece excesiva para la elaboración de un documento técnico.