El museo de la romanización ya tiene un proyecto pagado

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

La Xunta se ha gastado en el cuartel más de medio millón de euros en la última década

15 feb 2018 . Actualizado a las 23:25 h.

La historia del museo de la romanización en San Fernando comienza a ser larga, lo suficiente como para haber dado numerosos titulares de prensa y, de paso, costarle dinero a los lucenses y a los gallegos. Pocos se acuerdan que la Xunta, en enero del 2010, siendo conselleiro de Cultura el popular Roberto Varela, anunciaba un concurso de ideas para construir un museo en la que fue hasta inicios del siglo XXI la Delegación de Defensa.

Página de La Voz de Galicia del 23 de enero del 2010
Página de La Voz de Galicia del 23 de enero del 2010 LV

Aquel concurso, con 70.000 euros en premios, fue un éxito de participación, ya que concurrieron 70 propuestas, siendo elegida ganadora la que presentaron los arquitectos madrileños Pedrón Colón de Carvajal y Raquel Buj, autores del monumento de homenaje a las víctimas del 11-M. La Xunta había dado un paso para llevar a cabo una infraestructura con la que comenzó a soñar a inicios del siglo XXI cuando Orozco propuso a Pérez Varela un edificio para albergar las numerosas piezas romanas de la ciudad, llegando a ofrecer terrenos en O Carme y en el Fogar de Santa María. Prueba de la euforia que vivía la ciudad en el 2010, el entonces portavoz municipal del PP lucense, Jaime Castiñeira dejaba claro que «a Xunta cumpre con Lugo», y anunciaba que en el presupuesto autonómico irían 400.000 euros para el museo de la romanización. ¿Dónde y cuándo se gastaron?

Página de La Voz de Galicia del 16 de junio del 2010
Página de La Voz de Galicia del 16 de junio del 2010 LV

Cuando se anunció el ganador del concurso, el 15 de junio del 2010, Roberto Varela anunciaba que el proyecto estaría redactado a final de ese año y se licitarían las obras en el 2011, con una inversión prevista de 10 millones de euros. Pero algo empezó a torcerse en los planes de la Xunta, mientras el Concello, por su parte, seguía adelante con su proyecto de un museo sobre la historia de la ciudad, levantado con la confianza de que en San Fernando iba a ir uno sobre el pasado romano. En enero del 2012, el DOG publicaba el contrato para el proyecto básico, por un precio de 221.607 euros. Unos meses antes, el director xeral de Patrimonio, Rey Pichel, explicaba en el Parlamento que el museo romano de Lugo «será un fito cultural» y señalaba que ya se habían gastado 218.000 euros en protocolo de colaboración, estudios de conservación, pruebas de carga y refuerzos de seguridad, premios del concurso y excavaciones y estudios arqueológicos.

Página de La Voz de Galicia del 24 de septiembre del 2002
Página de La Voz de Galicia del 24 de septiembre del 2002 LV

La propuesta ganadora tuvo alegaciones y voces críticas porque en algunos aspectos no respetaba el edificio como BIC que era. El historiador Abel Vilela fue muy claro en su momento en La Voz (15-8-2010). Por ello, Pichel anunciaba en el Parlamento que se harían las modificaciones necesarias para adaptarlo y respetar su valor BIC. Incluso, Icomos, el organismo de la Unesco, llegó a dar el visto bueno a la propuesta finalmente presentada.

Pero en el 2013 todo cambió. Llegó a la Consellería de Cultura Jesús Vázquez y a Patrimonio María del Carmen Martínez y el proyecto se abandonó, aduciendo que la situación económica no lo permitía ni el cuartel era propiedad de la Xunta. Mientras, el edificio sufría un grave deterioro, y tras varias peticiones del Concello, se invirtieron 180.000 euros en su reforma. Icomos llegó a elaborar un informe favorable a la propuesta que ganaron Colón de Carvajal y Raquel Buj

Página de La Voz de Galicia del 9 de febrero del 2008
Página de La Voz de Galicia del 9 de febrero del 2008 LV

Dos páginas que muestran el compromiso de la Xunta con el museo en el cuartel

La creación de un museo de la romanización la acordó la Xunta que presidía Fraga en el 2002, tras haberlo solicitado Orozco nada más llegar a la alcaldía. Su ubicación no sería el cuartel, que iba ser destinado a auditorio, pero cuando se traslada el centro cultural a Magoi, se acuerda, ya con el bipartito, hacer el museo romano en el cuartel. El edificio, declarado BIC en el 2009, fue «entregado» a la Xunta para que hiciese el prometido museo. Cuando llegó Feijoo al gobierno, su conselleiro de Cultura, Roberto Varela, asumió la construcción del museo y convocó un concurso de ideas (22 de enero del 2010), que finalmente ganaron los arquitectos Pedro Colón de Carvajal y Raquel Buj (15 de junio del 2010), los autores del monumento a las víctimas del 11-M. En enero del 2012 se hizo el contrato para el proyecto.