David Holland falleció hace hoy una semana en el Hospital de Lugo tras un cáncer
23 ene 2018 . Actualizado a las 22:42 h.
Sorpresa y revuelo en A Fonsagrada porque muy pocos eran conscientes de que una de las estrellas del rock a nivel mundial era desde hace tres años un vecino más en la montaña lucense.
David Holland, ex batería del grupo de heavy Judas Priest, se asentó en Lamas de Campos, en el municipio fonsagradino, para vivir exento de agobios y pasar desapercibido en medio de la naturaleza. Tras cumplir condena en una cárcel británica por supuestamente violar a un joven de 17 años, llegó a A Fonsagrada, donde le compró una casa a un anticuario. Su vendedor se convirtió en uno de sus mejores compañeros hasta hace hoy una semana, día de su fallecimiento.
A Holland le habían diagnosticado un cáncer que no logró superar. Sus últimos días en A Fonsagrada los pasó en la Residencia Remanso de Paz, junto a Isabel Niño y Manuel Castelao. En estas instalaciones todavía se encuentran sus enseres y documentos personales. En la entrada de su vivienda se apilan varios paquetes sin abrir.
Los pocos que conocían a David Holland y su trayectoria, lo definen como una persona de trato agradable y recuerdan sus última visita al bar Caldeira, donde disfrutaba de un corto de cerveza.
Fuentes cercanas al fallecido han indicado que la incineración corrió a cargo de sus familiares, todos ellos residentes en Inglaterra y entre los cuales se encuentra su heredero. Parece que el exbaterista posee un buen patrimonio, entre el que se encuentran varias viviendas en Almería o Brasil.