Ana López Varela: «Nunca pensé en dedicarme al deporte»

Xosé Ramón Penoucos Blanco
x. r. penoucos LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

cedida

Vive desde hace años en Ibiza, pero reconoce que «las Navidades no son lo mismo si no estoy en Lugo»

18 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La fisioterapeuta lucense Ana López Varela no pensó nunca que iba a dedicarse profesionalmente al deporte, pero su primer contacto con el baloncesto le hizo quedarse prendada del mundo de la canasta y desarrolló toda su trayectoria en equipos de primer nivel como Celtas de Foz, Estudiantes, Ensino, Puig den Valls o Rivas Ecópolis. Actualmente reside en Ibiza trabajando en el servicio municipal de deportes del municipio de Santa Eulalia, aunque cada vez que puede escapa a Lugo, sobre todo en fiestas. La lucense se ha ganado el cariño de los ibicencos, que el pasado viernes le otorgaron un premio por un palmarés en el que figuran tanto títulos de liga y copa en el ámbito nacional a nivel de clubes como varias medallas con la selección española en citas internacionales.

-¿Cómo fue su llegada al mundo del baloncesto?

-La verdad es que nunca pensé en dedicarme profesionalmente al deporte. La prueba de ello es que en la carrera no escogí ninguna asignatura optativa relacionada con esta especialidad. La casualidad quiso que mi primer trabajo fuera con Pirulo en el Celtas de Foz y me gustó tanto que decidí continuar. A partir de ahí ya puse todos los medios para formarme en fisioterapia deportiva y hasta hoy.

-¿Le marcó especialmente alguno de los entrenadores con los que trabajó?

-Con todos mantuve una excelente relación y me ayudaron siempre, pero Juan Corral fue sin ningún género de duda mi mentor y la persona que confío plenamente en mí sin apenas conocerme y siendo una persona muy joven y bastante inexperta. Me enseñó que la fisioterapia que se hace en un banquillo o en un vestuario no la estudiamos en la universidad y que para trabajar en el deporte profesional no llega con ser bueno técnicamente, sino que hace falta un perfil personal especial y creyó en el mío. Siempre le estaré agradecida y será una persona especial para mí.

-¿Qué recuerdos tiene de su periplo en banquillos de equipos de élite y en varias categorías de la selección española?

-Todos muy positivos, comenzando por supuesto por el equipo de mi ciudad, el Ensino, pasando por cinco años maravillosos en Ibiza, al igual que mi estancia en Madrid. A todo ello añado las maravillosas experiencias que viví en distintos combinados nacionales.

-¿Puede decirse que ha tenido mucha suerte a lo largo de su carrera?

-Sin ninguna duda. Hay que tener muy claro que nuestro trabajo en la sombra en los equipos hace que no seamos muy visibles, por lo que no es fácil que se fijen en nosotros. En mi caso siempre me sentí muy respaldada y querida por los entrenadores que siempre me apoyaron tanto para fichar por equipos de élite como para ir con la selección.

-¿Cuándo decide dejar de trabajar con equipos?

-Llega un momento en el que te cansas de depender siempre de si entra o no la pelota para que los equipos salgan adelante y tengas trabajo. Tuve ofertas para irme al extranjero pero me costaba marcharme sola y decidí dejar los clubes. Finalmente estuve en un conjunto de fútbol de Tercera, pero no era la misma profesionalidad que el baloncesto y lo dejé.

-¿También dejó la selección?

-En absoluto, es el único vínculo que quiero mantener con el baloncesto profesional. Cada vez que voy me lo tomo con la filosofía del carpe díem (disfruta del momento) y eso es lo que hago y espero que sigan contando conmigo.

-¿Sufre el síndrome del isleño en Ibiza?

-Nunca lo padecí y puede que fuera debido a que al viajar tanto con el equipo no lo notaba. En mi caso intento salir lo máximo posible y pienso en la isla como mi pequeño refugio.

-¿Viaja habitualmente a Lugo?

-Sí, ya que voy muchas veces, sobre todo en fiestas, esencialmente San Froilán y Navidades, que no son lo mismo si no estoy en Lugo. Me encanta decir que tengo dos familias, la de sangre en mi tierra natal y la otra en la isla y a ambas las quiero con locura.

-¿Echa algo de menos por vivir en la isla?

-Solo ver deporte en directo. Me encantaría poder asistir a los partidos de Ensino, Breogán y Obradoiro, pero tengo que resignarme.