El base navarro ayudó a tirar del equipo en Huesca y cree que la defensa es una de las claves de los celestes
09 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Ricardo Uriz (Pamplona, 1980) llegó al Cafés Candelas Breogán este verano. Fue, junto con Matt Stainbrook, el único entero para pelear por la victoria en la cancha del Huesca la semana pasada y forma, con Christian Díaz, una de las parejas de bases más determinantes de la LEB Oro. Dispuesto a ceder en su lucimiento personal por el éxito colectivo, su compromiso y su experiencia son valores indispensables para los celestes esta campaña. El baloncestista navarro se acerca tranquilo después de una sesión de entrenamiento y sin perder la sonrisa en ningún momento.
-¿Qué tal está el equipo físicamente? ¿Ya al 100 %?
-Después del virus FIBA, como lo han denominado, ya estamos recuperados. Esta semana ya hemos entrenado todos juntos y la gente ya va cogiendo ese ritmo de juego que necesitamos. Vamos en buenas condiciones.
-¿Cómo fue ese partido en Huesca? Solo se le veía entero a usted y a Matt Stainbrook...
-Estamos hablando de que teníamos muchas bajas, pero además esa semana coincidió que jugamos tres partidos: domingo, miércoles y domingo, con dos viajes muy largos. A eso le unimos la ausencia de varios jugadores y de los que estábamos, dos renqueantes. Estábamos bajo mínimos y el equipo compitió hasta donde llegó.
-Para la confianza, ¿es mejor que la derrota haya llegado por una merma física tan importante en lugar de por otros factores?
-Sí. Sabíamos que la derrota iba a llegar antes o después. Es una liga muy dura y fuera de casa es muy difícil ganar casi cualquier partido. Llegó la primera y ahora tenemos que estar pensando en otra salida complicada, a un campo pequeño, donde ellos se sienten muy cómodos. Si se encuentran en su ritmo va a ser difícil porque tienen gente que mete mucho, que tiene calidad por fuera y creo que tenemos que estar preparados.
-¿Dónde cree que va a estar la clave para traer mañana la victoria de la cancha de Araberri?
-Nosotros tenemos que seguir en nuestra línea, agresivos en defensa e imprimiendo un ritmo muy alto de juego para poder llegar mejor al final. Si les dejamos jugar a ellos, con sus altos porcentajes de tiro de tres y con rebote, jugando encima en casa, lo vamos a tener complicado.
-¿Incide mucho Natxo Lezkano en que la victoria se construye desde estar muy bien atrás?
-Desde luego, es una de nuestras claves. Sabemos que si estamos duros atrás, si estamos intensos y provocamos pérdidas del rival, el equipo tiene una capacidad muy grande al contraataque y es así como nos sentimos más cómodos. Sabemos que por ahí pasa una de las claves para poder sacar los partidos adelante. Intentamos que todos los que salgan del banquillo estén a ese nivel de intensidad y ahogar a los equipos en ese sentido. Delante hay calidad suficiente, cualquiera puede jugar un partido de veintitantos puntos. Sabemos que atrás tenemos que bajar el culo y apretar, porque adelante ya saldrán las cosas.
-Se esperaba que el Breo estuviera entre los favoritos, ¿el Prat fue una sorpresa para todos?
-Está haciendo una temporada espectacular. Está ahora mismo como nosotros y eso habla muy bien de su trabajo. Para mí Manresa sigue siendo el gran favorito al ascenso y es verdad que la liga va a ser dura, porque después hay equipos como Oviedo o Melilla, incluso Palencia que está subiendo posiciones, que son muy duros. Equipos muy bien hechos, con presupuestos altos y la pelea será dura en la segunda vuelta.
-Primera semana de Kabasele, ¿cómo lleva la adaptación y cómo es la comunicación con él?
-Es verdad que es difícil comunicarse con él porque no habla castellano ni inglés y prácticamente nadie aquí habla francés. Nos comunicamos como podemos, él va viendo el juego también y poco a poco se va adaptando. Es un jugador muy atlético y espectacular y por ahora nos ha sorprendido para bien por su capacidad de adaptación.
-A nivel personal, después de cuatro años seguidos en el Guipuzkoa, ¿cómo se va encontrando en el Breogán y en Lugo?
-Muy bien. Estoy muy contento, es verdad que es una ciudad nueva y un club nuevo, pero me han acogido muy bien. Me siento con confianza, creo que este año tengo menos protagonismo que el pasado, pero estoy contento por el trabajo que estoy haciendo y por ayudar al equipo a conseguir las máximas victorias posibles.
-¿Qué espera a nivel personal de esta temporada en el Breo?
-Mi objetivo es llegar lo más alto posible y quiero llegar a ese tope que tiene el equipo para el final de temporada. No sé si será o no será o si lo conseguiremos, pero yo vengo con esa ilusión de ayudar a que el Breo esté lo más arriba posible.