El interior norteamericano tuvo muy claro que quería renovar en Lugo y apenas se lo pensó
31 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Matt Stainbrook (Ohio, 1992) transmite cuando habla el mismo carisma que le ronda en la cancha. Un aura de plácida tranquilidad que desarrollan las personas muy seguras de sí mismas. Ha terminado el entrenamiento y el interior del Cafés Candelas Breogán espera a pie de grada.
-¿Cómo va el tendón?
-Mi dedo está bien, ya no me duele y aunque todavía sigue algo rígido, estoy trabajando en su flexibilidad, sin más complicaciones. El resto de mi cuerpo está al 100 %, así que todo va bien.
-No habíamos hablado desde antes de que renovase con el Breogán, ¿cómo fue la negociación? ¿Le costó decidirse?
-Consideré que renovar con el Breogán era muy bueno para mí, tanto a nivel personal como profesional. Conozco al club, al entrenador y la dirección en la que quieren ir. Natxo quiere ganar y hará todo lo que pueda para ganar. Conocía al técnico de la temporada anterior, el tipo de jugadores que quería y la forma en la que quería jugar, eso hizo la decisión muy sencilla. Estoy seguro de que si hubiera esperado más habría podido valorar otras opciones, pero el interés en que me quedara era mutuo.
-Su cambio físico desde el año pasado a este es espectacular, ¿fue un proceso difícil?
-Definitivamente sí. Son muchos cambios a la hora de comer, tienes que trabajar más duro en el gimnasio y no fue para nada un proceso sencillo. Especialmente cuando teníamos un pequeño descanso y volvía a casa. En Estados Unidos no tenía ese seguimiento diario y se hizo difícil, pero estoy muy orgulloso de haberlo conseguido.
-El equipo lleva cinco partidos y cinco victorias, ¿está la confianza en lo más alto?
-Sí, la confianza de todo el equipo está muy alta. Eso no quiere decir que nos conformemos o que nos parezca suficiente. Me refiero a que estamos contentos por estar ganando los primeros partidos, pero eso no nos hace relajarnos de cara al siguiente. Queremos ganar siempre, todos los partidos que sea posible y mantener la confianza en lo más alto. Sabemos que si perdemos el miércoles ya tendremos que estar pendientes de lo que hagan otros equipos, mientras sigamos en esta dinámica dependemos solo de nosotros, así que entendemos la importancia de cada partido.
-Si ganáis en Valladolid os ponéis líderes, ¿eso es importante?
-Creo que sí. No es una situación a vida o muerte. No perderemos todo lo que hemos ganado hasta ahora por perder ese partido, pero sí queremos ser ese equipo que todo el mundo sienta como favorito, aunque eso nos haga tener toda la presión a la espalda. Creo que es importante para no cortar la dinámica.
-¿Qué espera del Valladolid?
-Me imagino que será un duelo realmente duro. Ningún partido fuera de casa es fácil en esta liga. Esperamos un rival muy físico, que nos pondrá las cosas difíciles. Vamos a tener que pelear desde el primer cuarto hasta el último y no habrá un descanso, como lo que vivimos en Melilla.
-El año pasado el ataque era el fuerte del equipo, ¿este también lo es la defensa?
-Sí, creo que trabajamos mucho la defensa y se está viendo que está siendo clave para nosotros este año. Hacemos mucho hincapié en eso, en muchos partidos la anotación nos está dando mucho, pero en otros está siendo la defensa lo que nos está manteniendo en el partido.
-¿Qué quiere de esta temporada a nivel personal?
-Todo lo que quiero es que el equipo gane. Es fácil decirlo, pero verdaderamente lo pienso, anotar mucho es importante y ser un gran reboteador también, pero si ganamos la liga y los playoffs seré el más feliz. Cuando ganas, pasan cosas buenas.