Un grupo de siete ciclistas lucenses que en la mañana de ayer salieron a hacer su habitual ruta acabaron aparcando la bicicleta para coger ramas de árboles y apagar un fuego originado en un pinar de Maira, a siete kilómetros de la parroquia lucense de Ombreiro.
Según relató Borja, uno de los ciclistas, se encontraban pedaleando cuando empezaron a ver humo. En principio no le dieron importancia porque creyeron que se trataba de una quema. «Seguimos circulando e metémonos por una pista asfaltada. Nisto xa vimos o lume pegado a pista. Chamamos ao 112 e metémonos por unha pista forestal para coller ramallos e apagar o lume», indicó este lucense, que añadió que a los veinte minutos el fuego estaba controlado.
Cuando llegaron los brigadistas, los ciclistas continuaron su ruta. Una muestra de que los ciclistas también protegen el monte cuando es necesario.