Confirman que los restos óseos hallados en Orizón pertenecen a José Torres, desaparecido hace seis años

tania taboada LUGO/ LA VOZ

LUGO CIUDAD

c.Castro

18 abr 2017 . Actualizado a las 13:43 h.

Los restos óseos encontrados el pasado día 19 de febrero en el monte comunal Bedro do Marco, en la parroquia de Santa Comba de Orizón, en Castro de Rei, pertenecen a José Torres Lodeiro, desaparecido el siete de enero del año 2011.

A punto de cumplirse dos meses del hallazgo, el Juzgado de Lugo comunicó el pasado martes a la familia que los huesos correspondían a José Torres. Ayer, huesos y pertenencias fueron entregadas a sus familiares. Acto seguido, los restos óseos fueron sepultados en el panteón. El próximo sábado, día 22 de abril, a las seis de la tarde, se celebrará un funeral en la iglesia de Orizón.

El informe de ADN ratificó las sospechas que desde el día del hallazgo se mantenían en torno a la identidad de los huesos. Ya desde un primer momento, sus allegados, especialmente su hija, Inés Torres, tenía claro que los restos y las pertenencias correspondían a su padre. Los restos de José Torres fueron encontrados la tarde del 19 de febrero por cuatro vecinos que revisaban el monte para la época de caza.

Ese día se trasladó a la zona la Guardia Civil y el forense y al día siguiente se produjo el levantamiento, fotografiaron el lugar y recogieron las prendas de vestir y las gafas.

El otro caso, en Meira

En Meira también se produjo el hallazgo el martes de la semana pasada de los restos de Oliva López, de 85 años, desaparecida el 16 de enero. Apareció en Grañanova, a 8 kilómetros de su casa de Murias-Seixosmil, hasta donde parece que se desplazó andando. Las autoridades ya adelantaron a la familia que los huesos corresponden a Oliva.