La alcaldesa confirma que el material depositado en el vertedero es de Fontiñas
11 ago 2016 . Actualizado a las 22:06 h.La gran escombrera situada a pie del Camiño Primitivo, declarado Patrimonio de la Humanidad, tuvo todos los beneplácitos del Ayuntamiento de Lugo. Fue la institución quien la promovió y, ahora, no va a hacer nada contra quien tiró allí los cascotes, ni contra el propietario del solar. No habrá ningún tipo de actuación y habrá que esperar a que en el plazo de unas semanas el material sea llevado a un vertedero oficial, que era donde debería estar desde el primer momento.
El gigantesco vertedero de restos de obra está en la calle Primavera en un solar que nunca llegó a estar vallado y que, por eso, constituye uno de los puntos de feísmo más destacados de la ciudad. Por uno de sus costados pasa el Camiño Primitivo y es una de las primeras estampas que los peregrinos obtienen en su camino hacia el centro. El lugar está a solo 500 metros de la Porta de San Pedro.
La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, confirmó ayer que los restos tirados en el lugar sin haberse adoptado ningún tipo de medida provienen de las obras llevadas a cabo en los últimos tiempos en la avenida das Fontiñas, donde fueron levantadas nuevamente las aceras para canalizaciones de agua.
La regidora explicó que toda obra supone inconvenientes para la ciudadanía. Recordó que cuando algún particular hacía reformas en casa solicitaba los servicios de un contenedor y, una vez lleno, era llevado a un vertedero de residuos de construcción. Pero en este caso, explicó, esa fórmula no era posible porque la gran magnitud de los trabajos realizados y el volumen de los materiales. Ante esta situación optaron por tirarlos al lado del Camiño Primitivo.
«Se lle digo a verdade, como xa estamos acostumados a que esta rúa sexa a Cenicienta de Lugo, xa non nos sorprendeu moito ver os camións transportando todo este material para aquí», explicó ayer por la mañana una vecina que paseaba su perro por la zona.
Otro residente fue más allá y dijo que era insólito que se tirase el escombro al lado del Camiño. «Si realmente no había otro sitio para depositarlo, que ya es difícil, lo lógico es que vallaran el solar, le colocasen una puerta con cerradura y dentro depositasen los residuos sin que quedaran a la vista de todos y sin que pongan en peligro a niños o personas ancianas. No se olvide que enfrente está un parque muy utilizado en estas alturas del año», dijo.
Lo que es totalmente evidente es que si la escombrera la promueve un particular o una empresa ajena a la obra municipal, hubiese motivado una intervención de la Patrulla Verde de la Policía Local que propondría la correspondiente sanción. En este caso no habrá actividad de ningún tipo. De hecho, son numerosas las actuaciones que lleva a cabo la guardia municipal en esta materia, en la de solares sin vallar y también sin limpiar.
Además de estar en pleno Camiño, la escombrera fue plantificada también prácticamente delante del centro social Maruja Mallo, el centro de día y un centro infantil. «E onte, para colmo, apareceu onte por aquí a brigada municipal votando algo de alcatrán», dijo un vecino.
«Todas as obras supoñen inconvenientes para os cidadáns», asegura la alcaldesa
El solar donde fueron tirados los restos ni tan siquiera está vallado