El gobierno local aplaza de nuevo la eliminación de chicles de las aceras

Enrique Gómez Souto
enrique g. souto LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

óscar cela

Dice que la máquina que probó sale demasiado cara y que contratará el servicio

18 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Pues no, finalmente no habrá en el servicio de aseo urbano una máquina para eliminar chicles del pavimento de las aceras. Al menos no habrá un artilugio como el que probó la empresa Urbaser, bajo la supervisión del concejal de Desenvolvemento Sostible, Daniel Piñeiro, el pasado 23 de febrero en calles del centro de la ciudad. El portavoz del gobierno lucense, Miguel Fernández, asegura que el producto que utiliza el citado aparato (caldo de remolacha) sale muy caro y que es preferible contratar las operaciones de limpieza para la eliminación de los chicles del pavimento de calzadas y aceras.

La máquina probada por Urbaser se denomina Gumpak y la distribuye la casa Moto Lugo. La relación entre resultado y costes no ha convencido a los técnicos municipales, según indica el portavoz del gobierno lucense, Miguel Fernández, por medio del servicio de comunicación del Concello. Decidida la renuncia a la compra del aparato, dicho miembro del equipo de la alcaldesa Lara Méndez asegura: «Os técnicos aínda están estudando cal é o mellor sistema para eliminar os chicles das aceras». Sobre la seguridad en la renuncia a la compra del Gumpak, Fernández dice que es del 98%.

Así las cosas, mientras tanto «usaranse as máquinas de limpeza normais». Que es lo mismo que decir que las calles de la capital lucense seguirán teniendo, unas más, otras menos, el desagradable sarpullido negro en el que se convierte la goma de mascar arrojada al suelo después de su consumo.

Entonces, ¿cuál es la solución? Pues la que menos concuerda con los planes que parecen perfilarse para intentar la municipalización del servicio de recogida de basura y limpieza viaria: «Contratar a limpeza por servizo realizado». Es algo que no se hizo de manera eficaz y regular hasta el momento, pese a lo escandaloso que es el problema en algunas calles, y seguramente tardará en concretarse en el futuro.

Según la información facilitada en su día, el citado artilugio se usa ya en municipios como Alcobendas, Don Benito, Ibiza y Marbella.