Condenada la Xunta a pagar los daños ocasionados por 5 menores que se fugaron

xosé Carreira LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Robaron en una empresa de congelados y se escaparon en una furgoneta que cogieron y acabaron abandonando en Arteixo

19 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La Xunta fue condenada como responsable civil subsidiaria a hacer frente al desaguisado ocasionado por cinco menores que se fugaron del centro Santo Ángel de Rábade en el que estaban acogidos. La Audiencia da validez a la sentencia que en su momento emitió la jueza de menores de Lugo y rechaza las tesis de la Administración autonómica expuestas en el recurso que presentó en su momento contra el fallo. Advierte el alto tribunal de Lugo que, cuando el responsable de los hechos sea un menor de 18 años, «responderán solidariamente con él de los daños y perjuicios causados sus padres, tutores, acogedores y guardadores legales o de hecho, por este orden». Asimismo especifica que «cuando estos no hubieran favorecido la conducta del menor con dolo o negligencia grave, su responsabilidad podrá ser moderada por el juez, según los casos.

En este caso la jueza de menores de Lugo había apreciado en la sentencia que fue recurrida que la responsabilidad solidaria correspondía al tutor o guardador, que en este caso era la Xunta, «al residir los menores autores del ilícito penal en un centro de protección de dicha entidad del que se fugaron, encontrándose en régimen de tutela o guarda, precisamente en atención a las funciones propias de dichas instituciones».

Hurtos en camiones

La sentencia declaró probado que los cinco menores fueron a una empresa de congelados del polígono industrial de Rábade en la noche del 22 de octubre del año 2014. Sin que conste que hubiesen empleado fuerza, entraron en el recinto de la empresa por la puerta trasera y una vez allí accedieron en la cabina de dos camiones. De una cogieron una tablet, un manos libres y otros efectos y de otra se llevaron un polar. Los dos primeros efectos fueron abandonados por los menores en un camino próximo a la N-VI a la altura del punto kilométrico 526, en el municipio de Guitiriz. Estaban totalmente inservibles.

Después de las sustracciones indicadas, los cinco menores se apoderaron de una furgoneta valorada en 3.200 euros. Estaba abierta y con las llaves puestas. Uno de los menores se puso al frente del volante y en la misma viajaron hasta que la abandonaron en la zona de Arteixo. Allí fue recuperada y posteriormente devuelta a la empresa propietaria. No presentaba ningún desperfecto cuando fue encontrada. Dice la sentencia que el menor no tenía permiso de conducir.

Las fugas de menores de los centros de acogida no suelen ser un hecho aislado. La pasada semana, por ejemplo, se produjo la escapada de varios que estaban en Monterroso.

Parte de lo sustraído lo tiraron en una pista próxima a la N-VI en Guitiriz