de dónde partió
Una decisión de Madrid. En los ámbitos del Partido Popular de Lugo muy pocos sabían el viernes que se iba a producir el relevo. Algunas fuentes señalaron que tenía conocimiento de la decisión de Burgos el presidente provincial del partido, José Manuel Barreiro. La decisión, sin embargo, parece ser que no le había sido comunicada ni siquiera al subdelegado del Gobierno, Ramón Carballo, que es el máximo responsable de la administración central en Lugo, que se enteró a toro pasado. A Burgos le recriminan que no le haya tendido un puente de plata, con el ofrecimiento de la jubilación, a la que habría accedido con 69 años, en lugar de cesarlo de forma fulminante.
una sorpresa
Decisión inesperada. No se la esperaban ni el interesado, que profesionalmente enfilaba el último tramo para jubilarse, después de rebasar cumplidamente los 65 años, ni las personas, -que no eran pocas- que conocían la existencia de las dos denuncias por parte del funcionario del mismo edificio. La primera llegó al Ministerio de Empleo y Seguridad Social, a los responsables del PP en Lugo y a los medios de comunicación. A estos últimos a través de una denuncia anónima. Fue poco después de que Antonio Nores tomara posesión. La segunda, más reciente, en los mismos términos, es decir, denunciando la posible incompatibilidad del puesto de director provincial de la TGSS y del INSS con el asesoramiento al Colegio de Aparejadores, y las clases en la Escola de Relacións Laborais como profesor de Derecho de la Seguridad Social.