Las propuestas de la campaña motivan poco al electorado

LUGO CIUDAD

17 may 2015 . Actualizado a las 12:36 h.

Lugo sigue a la cabeza de los indecisos de las ciudades gallegas aunque el porcentaje haya bajado ligeramente del 40%. Una situación preocupante porque los candidatos no paran de estar en la calle lanzando propuestas a diestra y siniestra, y hasta en medio de la calle. Unos repartiendo panfletos como voceadores agresivos metiendo por los ojos al turista despistado el menú del mejor y más barato restaurante para una cena romántica. Otros en los mítines, intentando llenar locales calculados con sus amigos y votantes acérrimos, para que no quede un lugar libre y dar la sensación de que el éxito va a ser arrollador a juicio del interés que despiertan nuestros próceres.

Otros visitando pueblos a los que nunca habían ido, para presentarse y tomar nota del último bache y prometer repararlo antes de que cante un gallo «si me votan a mi», porque si votan al otro ... usted verá.

La clase política en general, y la de Lugo tal cual como la general, siguen haciendo lo que a casi nadie le interesa. Y buena prueba de ello es que nadie está interesado por los mítines ni por la campaña, lo consideran una hipocresía y la suspenderían o reducirían drásticamente para que los representantes públicos se dedicasen a trabajar por lo público y no a dilapidar el dinero de los ciudadanos en actos de autobombo y en colgar sus fotos por las farolas para alimentar su ego o para vencer el ridículo que les debe producir verse tantas veces repetidos.

Y otra prueba de que sus propuestas interesan a bien pocos es la abstención tan alta que arrojan las encuestas de principio de campaña, y que se mantiene después de muchos días de pisar la calle.

A los ciudadanos les gustaría saber en que se gasta la astronómica cantidad que se recauda cada año por el IBI o por otros muchos impuestos municipales. En donde se podría recortar el gasto (en personal, en dedicaciones exclusivas, en chiringuitos...) para poder dedicarlo a mejorar la vida de los ciudadanos, o para pagar menos impuestos, que viene siendo lo mismo que mejorar la calidad de vida. Pero de eso poco se habla.