Recortes de personal y horario en las farmacias

La Voz

LUGO CIUDAD

25 ago 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Los responsables de las farmacias gallegas han asumido de mejor gana la receta por principio activo que el catálogo gallego y aseguran que producirá más ahorro. El presidente de la Federación Gallega de Farmacias, José Luis Rodríguez Dacal, afirma que «las órdenes de precios de referencia es lo que realmente ahorra, y los cambios del real decreto son mucho más importantes que el catálogo».

La presidenta del colegio oficial de farmacéuticos de Lugo, Ana Prieto, tiene una opinión similar: «La receta por principio activo es igual para todos y se evitan desigualdades, además de no excluir ningún fármaco de la prescripción. Esto se va a traducir en una bajada generalizada de los precios».

Esta bajada afectará al sector de las farmacias y, más que en el cierre de oficinas, en la reducción del horario de apertura y del personal. Ana Prieto señala que Galicia tiene una ratio de 2,3 titulados por oficina, con profesionales farmacéuticos accesibles en un horario amplio, por lo que las medidas de recorte podrían llevar a bajar la ratio y a reducir los horarios de apertura. No obstante, Prieto insta a las Aadministraciones a que tomen medidas «en partidas verdaderamente ineficientes del gasto sanitario, ya que las recetas son solo el 20 % del gasto sanitario total».

Rosa Lendoiro, presidenta del colegio de A Coruña, coincide en que las medidas afectan económicamente a las farmacias, por lo que podrá traducirse en una reducción del personal.

Tratamiento crónicos

Una de las críticas a la receta por principio activo es que, en la práctica, los pacientes crónicos sufrirán nuevos cambios en sus tratamientos. Los médicos coinciden en que esto puede pasar porque no todas las farmacias manejan los mismos medicamentos si hay varios de menor precio, o si se revisan. De hecho, el presidente del colegio de médicos de A Coruña, Luciano Vidán, admite que ética y científicamente lo lógico es la prescripción por principio activo «pero en el día a día se pierde la simbología y confianza entre médico y paciente».

Rodríguez Dacal, sin embargo, asegura que «con el catálogo sí que se les cambió el tratamiento a los usuarios varias veces».