Investigan la muerte de un joven de 19 años en un motel a las afueras de Lugo

LUGO CIUDAD

03 sep 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La Policía Nacional de Lugo investiga la muerte de un joven que apareció ayer por la tarde en el motel Montecarlo, situado en las afueras de Lugo, concretamente en la carretera de Santiago (N-540) a la altura de Santalla, en la parroquia de Esperante. El fallecido es B. M. L., tiene 19 años de edad y es vecino de Lugo. Fue hallado sin vida en una de las habitaciones del establecimiento. Junto a él se encontraba una joven, V. F. C., también vecina de la capital lucense y de 19 años, y que al cierre de esta edición permanecía ingresada con pronóstico muy grave en una de las plantas del Hospital Xeral-Calde.

Fuentes del servicio sanitario 061 indicaron que el extraño suceso pudo producirse debido a una intoxicación provocada por la inhalación de dióxido de carbono procedente del tubo de escape del coche con el que la pareja había entrado en el lugar y que, al parecer, había permanecido encendido durante buena parte de la noche. El establecimiento tiene un sistema de entradas que favorece la intimidad de los huéspedes, de modo que el garaje está comunicado con la habitación a través de una puerta intermedia.

Algunas versiones apuntan a que fue uno de los responsables del establecimiento hostelero quien dio la voz de alarma a los servicios de emergencia sobre las cuatro de la tarde al encontrar a los jóvenes inconscientes, cuando se personó en el cuarto al ver que no lo abandonaban una vez superada la hora máxima de salida. Otras fuentes señalan que fueron las familias quienes dieron la voz de alerta. Afirman que los jóvenes habían reservado ayer por la tarde la habitación. Tras salir a cenar fuera, volvieron y pasaron allí toda la noche. A mediodía, al ver que no regresaban a sus respectivas casas, los familiares habrían intentado localizarlos sin éxito en sus teléfonos móviles.

Inhalaciones de gases

En este sentido, el 061 recibió el aviso a las 16.16 horas y de inmediato desplazó al lugar una ambulancia medicalizada y otra asistencial en la que iba un médico. In situ comprobaron que los jóvenes habían inhalado grandes cantidades de gases. Fueron los mismos servicios sanitarios los que confirmaron el fallecimiento del hombre. Asimismo, decidieron trasladar a la mujer a las urgencias del centro hospitalario, adonde llegó pasadas las cinco y cuarto de la tarde. Tras ser explorada, los médicos decidieron su ingreso en una de las plantas.

Al motel se desplazó también una patrulla de la Policía Nacional, que al comprobar que la muerte del chico no se había producido por causas naturales avisó a las policías judicial y científica, que investigan lo ocurrido.