Lois Diéguez inauguró la feria con un recorrido por los escritores de la comarca de Terra de Lemos

Marina Fernández

LUGO CIUDAD

24 ago 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La décima edición de la Feira do Libro de Monforte echó a andar de la mano de las palabras del escritor monfortino Lois Diéguez. El miércoles, en la calle Cardenal, desfilaron por el aire a través de la voz del poeta y narrador los nombres que la comarca ha dado a la literatura gallega y universal, y en los que Lois Diéguez ve la creación de la historia de la tierra que vio nacer a estos escritores.

Lois Diéguez nació en Monforte, donde se estableció durante sus estudios de bachillerato, uniéndose de este modo a su maestro literato Manuel María. De una forma espontánea y como resultado de su adentramiento en el mundo real aunque semiclandestino de la escritura en gallego nacerá su primer poemario, Albre de espranza . En Madrid, adonde se trasladó en sus años universitarios, Diéguez vivió una etapa clave en la construcción de su personalidad y su sensibilidad política. Tras publicar una de sus novelas más conocidas, A Torre de Babel, regresa a Galicia donde durante unos años deja de escribir para centrarse en el activismo político. En 1986 resurge con inesperada fuerza con la publicación de A canción do Vagamundo , Premio Blanco Amor. Desde 1972 trabaja como topógrafo en el Ayuntamiento de Lugo, actividad que combina con una incansable creación artística. Acaba de publicar su última obra narrativa, O canto do muecín , de la que firmó ejemplares en Monforte tras la lectura del pregón.

En su escrito de apertura de la feria, titulado A historia das historias , Lois Diéguez se centró en nuestros libros, «instrumentos que gardan historia, o noso pasado e o noso futuro». Autores monfortinos como Ricardo Rodríguez Vilariño de Barbeito o el que fue cronista de la ciudad Manuel Hermida Balado «son algúns dos galegos que podemos celebrar. Definiron a historia monfortina, a beleza na súa forma de poñela fronte a nós». También hizo parte de su pregón a Antón Lopo, Manuel María «luz fronte á longa posguerra», y Lois Pereiro, «unha xeración libre, aberta e fondamente vital nunha cidade morta e atada». Manolo Veiga, Xabier Quiroga, Olga Novo, Sabela Rodríguez y Teresa Moure completan los compañeros que Lois Diéguez hizo presentes en la inauguración de la última feria del libro del circuito gallego. «A historia das historias, o soporte do que todos e todas no noso pensamento construimos» fue el pregón de Lois Diéguez. Despidió a sus vecinos pidiendo respeto a los tres dioses que nos alimentan, el pan, el libro y la casa. Y gritó: «Vivan os libros, o pan e o viño da Ribeira».