Investigan al propietario de nueve perros que vivían encadenados y rodeados de huesos en Guitiriz
GUITIRIZ
El propietario intentó venderlos de forma irregular tras las denuncias aparecidas en redes sociales
07 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Una denuncia anónima destapó la existencia de nueve perros en Pígara, Guitiriz que vivían encadenados, rodeados de excrementos y restos óseos, sin espacio apenas para moverse. Algunos carecen de lugar en el que resguardarse y solo tres de los animales tenían el microchip reglamentario.
Los canes, explican algunos vecinos, le tienen miedo al propietario que escenifican en cuanto se les acerca. El hombre se dedica a la compra-venta de animales sin tener autorización para hacerlo, tal y como constatan en esta aldea guitiricense.
Además, y tras comprobar las numerosas muestras de repulsa que estaban siendo difundidas a través las redes sociales, el dueño de los animales trató de agilizar los trámites para intentar dar salida a los perros cuanto antes. Los anuncios en una conocida web destapan que ofrecía de manera irregular cachorros a un precio de 50 euros cada uno.
Algunos de los animales estaban enjaulados y al menos una hembra está preñada, por lo que todo apunta a que el hombre se dedica a hacer negocio con los perros. Asimismo, el propietario vende a través de Internet otros animales como cabras y parece ser que incluso ofrece algún servicio veterinario.
El propietario de los canes está siendo investigado por tener animales en mal estado, según confirman desde la Consellería de Medio Ambiente. Cuatro perros ya han sido decomisados hace unos días por estar en malas condiciones, entre ellos una hembra preñada. Ahora están en el refugio de Garatuxa, con el que tiene convenio el Concello de Guitiriz, tal y como marca y exige la ley. El resto de animales, otros cinco, ya tienen microchip, aseguran desde la Xunta.
Los agentes de la Consellería de Medio Ambiente ya le pidieron al responsable que acondicionase la zona y además le realizarán un exhaustivo seguimiento en los próximos días para comprobar que lo hace. Por otra parte, el hombre fue informado de que no puede criar ni vender animales puesto que no cuenta con autorizaciones pertinentes ni como criador ni como vendedor.
La Lei de protección e benestar dos animais de compañía de Galicia pone el foco en la necesidad de que los animales vivan en buenas condiciones higiénico sanitarias puesto que, recoge, «maltratar non significa só violencia extrema, abrangue actuacións máis habituais».