Instalan cámaras en el balneario de Guitiriz para evitar los continuos robos

X.M.P. VILALBA / LA VOZ

GUITIRIZ

SUSO PENA

Las instalaciones fueron de nuevo asaltadas en días pasados, con sustracción de objetos

30 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El balneario de Guitiriz cuenta desde hace días con cámaras de vigilancia. La medida fue decidida y puesta en práctica como una forma de intentar evitar los continuos robos que sufre en los últimos tiempos el complejo hostelero y termal. Desde que las instalaciones quedaron primero sin uso y luego sin nadie que las habitase, se han sucedido los asaltos, en los que se han robado diversas máquinas y herramientas de distintas dependencias.

Así las cosas, el administrador acordó la instalación de las cámaras, y decidió también entregar una llave de la entrada principal a la Guardia Civil. Con esa medida se pretende que personal de la Benemérita pueda patrullar en algún momento por el recinto, en donde algunos de los robos se han cometido en pleno día.

Esas incursiones continuaron en días pasados, en las que los robos acabaron con un botín de diverso material. Albornoces, varios taladros y un compresor de aire formaron el reciente botín. Lo ocurrido supone en ese sentido una repetición de episodios de los últimos meses, en los que se sustrajeron sofás, quads y hasta centenares de litros de gasoil. En alguna ocasión, como ocurrió en la segunda quincena de diciembre, se causaron graves daños en la zona del hotel, en la del campo de golf y en la del club termal. Por la forma de actuar, incluso se llegó a suponer que el autor o los autores conocían bien las instalaciones.

Apertura

Por otro lado, el portalón de acceso está abierto varias horas al día, ya que el Concello, de acuerdo con el administrador, tomó esa decisión el pasado otoño, asumiendo la responsabilidad de abrir y de cerrar. Así se quiso mantener la posibilidad de tomar las aguas mineromedicinales en la fuente de San Xoán, muy arraigada en los vecinos del municipio.

El administrador, por otro lado, está a la espera de que el Concello dote de más alumbrado a los alrededores, que son una de las zonas de las afueras del casco urbano más frecuentadas por vecinos en sus paseos.