¡Qué difícil parece comprar algunas casas de Guitiriz!

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS VILALBA / LA VOZ

GUITIRIZ

SUO PENA

El Concello ha sido incapaz de adquirir un inmueble para dedicarlo a usos socioculturales

08 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Un paseo por Guitiriz permite ver ejemplos de una arquitectura de otros tiempos. El grado de conservación varía de unos casos a otros; pero lo que iguala a algunos edificios con otros, en determinados casos, es algo ajeno a lo arquitectónico: algunos coinciden en lo difícil, casi imposible, que le ha resultado al Concello su adquisición .

Comprar un edificio para dedicarlo a usos socioculturales es una propuesta para la que el gobierno local ha puesto sus ojos en al menos dos inmuebles. Uno de ellos es el pazo de San Antonio, próximo a la iglesia parroquial; el otro, el del antiguo cine, situado en la calle Rosalía de Castro.

SUSO PENA

En cuanto al primero, la propiedad está muy repartida. Son decenas los propietarios del edificio, cuyo estado se ha ido deteriorando con el paso de los años. Los contactos apenas pasaron de una fase inicial, aunque parecieron suficientes para que el gobierno local le pareciese una empresa más bien imposible: «Non teño ningunha esperanza», dijo ayer. ¿Está, pues, descartado del todo el propósito? «Xa creo que o abandonamos», afirmó.

También se han puesto los ojos en el edificio del antiguo cine, en el que el escollo no ha sido el minifundio de la propiedad. El resultado, por ahora, ofrece los mismos resultados que en el primer caso. En ambos inmuebles, explicó la alcaldesa, el destino sería la consecución de un edificio capaz de albergar instalaciones como un auditorio y ubicado en pleno centro de la localidad.

Ese fin llegó a planear sobre la Casa da Botica, cuya compra sí logró cerrar el Concello, aunque tras un largo proceso, y que finalmente se eligió como sede de una residencia de mayores, que construirá la Diputación. En el mandato 2007-2011 el concejal Jesús Veres, entonces en la oposición, planteó que la antigua nave del Senpa, que había pasado al Concello, se destinase a auditorio; su propuesta, sin embargo, no fue tenida en cuenta.

En el antiguo cine también se fijó en sus primeros tiempos la Asociación Cultural Xermolos, que pretendía alquilarlo para realizar proyecciones y tener un cineclub entre sus actividades. Tampoco esa iniciativa tuvo éxito, si bien Xermolos llegó a lograr un resultado concreto: consiguió la cesión de varias decenas de butacas, hoy guardadas a la espera de que la casa natal del poeta Xosé María Díaz Castro, situada en el barrio de Vilariño (Os Vilares), sea restaurada y se instalen en ese edificio. El autor de Nimbos vería así simbolizada su afición al séptimo arte.

Hace décadas, Xermolos quiso utilizar el antiguo cine para organizar proyecciones