Las nuevas normas de Montoro provocan debate en Guitiriz

X.M.P. VILALBA / LA VOZ

GUITIRIZ

El PSOE prevé adjudicar la ayuda a domicilio a una empresa, y el Bloque y Blengua se oponen

01 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Que se puedan usar los fondos de superávit en necesidades de los vecinos es algo que tiene directa repercusión en Guitiriz: la imposibilidad de utilizar ese dinero llevó al gobierno local a abrir la puerta a poner un servicio, el de ayuda en el hogar, a una empresa. Para hoy, a la una y media de la tarde, está previsto un pleno extraordinario en el que se estudiará el pliego de cláusulas que regirán la concesión.

La alcaldesa, Regina Polín (PSOE), sigue adelante con esa idea. La regidora, que anteayer asistió al encuentro en el que cargos municipales de toda España se reunieron en Madrid, cree que la medida anunciada en días pasados por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, no está aún concretada en cómo se puede gastar el superávit municipal. Sí lo están, en cambio, otros asuntos, como recalcó ayer la alcaldesa: hay alrededor de medio centenar de personas en lista de espera, y el Concello no puede contratar más personal.

Distinta es la opinión de ediles de la oposición. El del BNG, Xosé Lois González Souto, opina que el acuerdo de Montoro con la FEMP deja al gobierno guitiricense sin argumentos: opina que la concesión a una empresa solo causaría un aumento del gasto sin mejorar la calidad del servicio. Para el Bloque, se trata de una «mala decisión». El concejal no adscrito, Jordi Blengua, también sostiene que ahora hay más argumentos para mantener el servicio en manos del Concello.