Así se agrupan fincas agrarias con rapidez: Friol aplica el modelo

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS LUGO / LA VOZ

FRIOL

En Friol abundan las explotaciones de ganado vacuno, tanto de carne como de leche
En Friol abundan las explotaciones de ganado vacuno, tanto de carne como de leche ALBERTO LÓPEZ

La primera parte del proceso acaba con casi 400 hectáreas concentradas

03 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Las permutas de tierra agraria que se llevan a cabo en Friol rompen todas las expectativas. La primera fase, solo pendiente de trámites burocráticos para acabar pero ya con la posibilidad de que los implicados utilicen las fincas, ha abarcado unas 400 hectáreas.

Para comprender por qué que el resultado ha desbordado las previsiones, basta recordar que hace unos diez meses se contaba con actuar en unas 200 hectáreas, más de lo que se suponía solo unos meses antes. También el número de ganaderos es mayor de lo estimado cuando se puso en marcha el proceso: se sumaron unos 50, más del doble de lo que se esperaba al principio de la iniciativa.

El proceso tiene como consecuencia que personas dedicadas a la agricultura o a la ganadería, con claro predominio de esta última actividad, pasan a disponer de fincas de más tamaño agrupando terreno propio y ajeno. El resultado es similar al de una concentración parcelaria, pero con un proceso más breve y con un coste más reducido.

En primer lugar, los propietarios de las tierras ya pueden utilizarlas, aunque faltan por cerrarse los trámites en la notaría y en el registro de la propiedad. No pasaron dos años desde que el Concello friolense dio los primeros pasos en este proceso, con el que se pretendía resolver un problema muy presente en la Galicia rural, el poco tamaño de las fincas.

En segundo, el desembolso económico ha rondado los 50.000 euros. La Axencia Galega para o Desenvolvemento Rural (Agader) aportó la mayoría de esa cantidad, completada con fondos del Concello. El alcalde de Friol, José Ángel Santos, echa cuentas, y calcula que el coste ha sido aproximadamente la décima parte de lo necesario para llevar a cabo una concentración parcelaria convencional.

Otra diferencia es que en este proceso solo se han visto implicados aquellas personas que se interesaron por sumarse. La participación no tuvo coste alguno para los agricultores y ganaderos, que solo necesitaron trasladar su interés al Concello para conseguir agrupar sus fincas. Así las cosas, pensar en una segunda fase parece más que una simple hipótesis, como reconoce el regidor de Friol. Santos incluso avanza que se pretenderá comenzarla antes de que acabe este año.

Xiá, Lea, Nodar, Condes y Rocha —esta, en cabeza por el número de hectáreas— fueron las parroquias donde se agrupó terreno, y ganaderos titulares de explotaciones de carne y de leche, los que se beneficiaron. Santos no cree que sea un sistema exclusivo de Friol, y subraya que se trata de un mecanismo recogido en la legislación autonómica. De todos modos, no por ello deja de admitir que siente la experiencia como un éxito, y hasta desvela que otros ayuntamientos han contactado con el friolense para intentar poner en marcha este mismo proceso. «É un sistema idóneo para reagrupar leiras», dice.

 «Ter máis terreo é necesario»

Entre los ganaderos que han participado en el proceso hay sensación de que la medida merece la pena. Así se expresa, por ejemplo, Antonio Villar, ganadero que forma parte de una SAT de la parroquia de Nodar con unas 380 cabezas. La explotación se dedica a la ganadería de leche, y el proceso de permutas ha permitido a él y a sus socios agrupar unas 30 hectáreas.

Para Villar, no hay duda de que las circunstancias económicas actuales hacen más necesario que nunca el disponer de terreno. «Ter máis terreo sempre é necesario. Canto máis, mellor; e co que se aveciña, máis», dice, convencido de que los ganaderos precisan más superficie que nunca para reducir el gasto en la compra de materias primas.

Este ganadero, de 43 años, opina que la iniciativa es positiva, aunque le pone un pero. «Xa tiña que estar feita antes de agora», afirma. Desde su punto de vista, con estas permutas no solo ganan terreno las explotaciones, sino que se combate otro problema, el abandono del medio rural: «O medio rural está moi abandonado», se lamenta.