El San Rafael se dedicará a fines asistenciales si la Xunta paga las obras
CASTRO DE REI
La Diputación descarta las mejoras que pidió el Concello de Castro de Rei
11 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.La rehabilitación del hospital San Rafael, situado en Castro de Ribeiras de Lea y vacío desde el 2012, puede ser posible si la Xunta decide financiar las obras. La Diputación descarta realizar trabajos de restauración en el edificio, en contra de lo que pidió el Concello de Castro de Rei en un pleno de hace meses.
En la respuesta mandada al Concello en días pasados, la Diputación rechaza que el inmueble pueda formar parte de la red de geriátricos que tiene en marcha -unos funcionando, otros con previsión de apertura, otros en obras-. El diputado encargado del área de Promoción Económica e Social, Pablo Rivera, afirma que el organismo provincial tiene un modelo en el que el San Rafael no parece encajar. La Diputación, dice, prefiere un sistema de geriátricos con pocos usuarios para dar una atención más personalizada. «A Deputación ten o seu propio modelo de residencias, distribuído en base ás necesidades da provincia», dice.
La única posibilidad que el actual gobierno provincial admite para esas instalaciones es una reforma financiada por la Xunta como entidad «competente en materia de política social» en la comunidad. Rivera escribe en la respuesta que si se cumple ese supuesto, se abrirá la puerta a un convenio para que el San Rafael se dedique a fines asistenciales o sociales.
Para el Concello de Castro de Rei, la respuesta dada por la Diputación no parece dar probabilidades a su aspiración. El alcalde, Francisco Balado, explicó ayer que la propuesta municipal no se centraba en dedicar el edificio a una residencia sino en darle una finalidad asistencial o social, en la línea plasmada en el acuerdo plenario de los años cuarenta: el Ayuntamiento de Castro de Rei cedió a la Diputación unas 300 hectáreas de terreno, en las que luego se construyeron tanto el hospital como la Granja Gayoso Castro, que aún funciona, y la escuela hogar. Ese último servicio desapareció, y el edificio acoge las instalaciones de la Fundación de daño cerebral (Fudace).
Balado duda de la viabilidad del mensaje trasladado por la Diputación y considera poco probable que la Xunta acepte financiar obras en un edificio que no es suyo. «Se falla a vontade política, falla todo», manifestó. Por otro lado, el Concello carece de un estudio detallado sobre el coste de la rehabilitación, aunque sí tiene cálculos: según desveló el alcalde ayer, podrían necesitarse unos cinco millones de euros para las obras.
Aunque lleva ocho años cerrado y sin actividad, desde que se marcharon los internos, el estado del inmueble no parece por ahora alarmante. Balado subrayó que el tejado estaba todavía en buenas condiciones, y recalcó además que cuestiones indispensables en estos momentos para poder dedicar el edificio a residencia geriátrica -por ejemplo, la anchura de los pasillos- se cumplían sin problema. De todos modos, alertó de que el deterioro no haría sino avanzar de mantenerse el edificio sin actividad.
La iniciativa privada, una opción posible
Si la Diputación rechaza rehabilitar el edificio y la Xunta descarta la idea del convenio que propone el organismo provincial, una posible solución para dar uso al San Rafael es lograr implicación de capital privado. El alcalde, aunque prudente, no cerró ayer la puerta a esa idea ni descartó que el Concello pudiese participar en un proyecto aportando parte del capital. De todos modos, por ahora no hay contactos firmes para ensayar esa vía.