Los datos desvelados en las últimas semanas apuntan a la creación de unos 600 puestos de trabajo, entre empleos directos e indirectos, cuando el proyecto de Rozas se encuentre en funcionamiento. A ello habrá que sumarle el movimiento de construcción de las instalaciones necesarias, con la participación de varias empresas.
La portavoz socialista cree que el Concello debe aprovechar esta oportunidad, gestionando que empresas auxiliares se instalen en el polígono de Castro de Ribeiras de Lea y propiciando un bum como el que se vivió, salvando las distancias, en la costa en los años 70 con la construcción de la planta de Alúmina Aluminio. Así, afirma Marisa Rodríguez, se conseguirá, como fin último, una creación de empleo muy necesaria en estos momentos. El alcalde opina que el impacto económico se notará en el municipio, para lo cual se espera lograr la instalación de empresas; pero además, apunta Balado, los efectos pueden extenderse a otros concellos.