El presidente de la Diputación pretendía cerrar ayer la organización de su equipo
25 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El presidente de la Diputación de Lugo, el socialista Darío Campos, quería cerrar ayer la conformación del gobierno provincial, para darlo a conocer el lunes. Campos, en declaraciones a medios de comunicación, dijo por la mañana que tenía prácticamente ultimado su gobierno y admitía que uno de los asuntos a los que aún le daba vueltas era a la inclusión o no de Manuel Martínez en la junta de gobierno. Por la tarde, en algunos ámbitos políticos lucenses se daba por seguro que en la junta de gobierno estarán los dos diputados del Bloque, pero no el alcalde de Becerreá, Manuel Martínez, que es algo que vienen reclamando los nacionalistas.
En sus declaraciones de días anteriores, el presidente de la Diputación, Darío Campos, insistió en que todos los diputados socialistas tendrán responsabilidades de gestión. En el caso de Martínez, ayer dijo que «puede llevar Vías y Obras» o, puntualizó, cualquier otra responsabilidad. Las declaraciones de Campos constituyen una aviso a navegantes de lo que puede ocurrir, porque Martínez exigió, para apoyar la moción de censura, formar parte de la junta de gobierno y asumir la responsabilidad de Vías y Obras y Parque Móvil. Como ya se indicó, a primera hora de la noche, en algunos círculos políticos se daba por segura la exclusión de Martínez de la junta de gobierno. De ser así, el alcalde de Becerreá tendrá que adoptar decisiones que seguramente incidirán en las condiciones en las que tendrá que gobernar Campos. Hay que recordar que Martínez renunció primero a la presidencia de la Diputación y poco después a la vicepresidencia.
En los medios antes aludidos se apuntaba también anoche que de los otros dos imputados, podría entrar en la junta de gobierno el socialista Lino Rodríguez, pero no la mariñana María Loureiro.
Puyazos de Barreiro
El presidente provincial del PP, José Manuel Barreiro, señaló ayer que el socialista Darío Campos está «metido en un avispero» del que no sabe cómo salir, entre otras cosas porque el secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, utiliza la institución provincial como «salvavidas político».
Barreiro destacó que tres semanas después de que socialistas y nacionalistas presentasen la moción de censura que les permitió hacerse con el control de la Diputación siguen sin ponerse de acuerdo. Considera que es «una tomadura de pelo», dado que, según su percepción, dicha situación se da porque Besteiro pretende solventar a cuenta de la institución sus problemas y los de su entorno.
Una prueba
El presidente provincial del Partido Popular y portavoz de este partido en el Senado pidió «a la sociedad lucense que tome nota, que compare y analice las distintas formas de gobernar» las instituciones.
Barreiro opinó que a estas alturas la sociedad lucense desconoce por qué fue presentada la moción de censura. De nuevo instó a que a quien corresponda aclare qué hizo que el diputado provincial y alcalde de Becerreá, Manuel Martínez, cambiase de decisión y apoyase la moción de censura a pesar de que no ser el candidato a la presidencia.