Aunque cuenta que ha estado en Galicia en varias ocasiones, Alejandro Quiroga explica que nunca ha visitado la provincia de Lugo ni Becerreá, el municipio de la montaña lucense del que eran originarios sus abuelos. Pedro Gómez Deiros y Josefa Díaz Arias nacieron a principios del siglo XX en Quintá de Cancelada, una parroquia que en el año 2007 rondaba los 160 habitantes distribuidos en una decena de núcleos de población, según los datos que recoge la web oficial del Concello de Becerreá.
Las muiñeiras le hacen sonreír
«Después de haber perdido a mi madre hace tan poquito, apenas tres meses, lo único que hago es escuchar muiñeiras. Y eso me hace sonreír. Cada vez que escucho una me emociono», subraya este argentino afincado en Londres que trabaja desde hace 16 años en el departamento de atención al cliente de la aerolínea Air France. Y es que, pese a ser un ciudadano del mundo, el ADN galaico sigue corriendo por sus venas. «Encontrar a alguien en Lugo me alegraría el corazón muchísimo ahora que ha muerto mi madre. Sería como encontrar una extensión de mamá y de los abuelos. Espero que alguien me pueda dar una luz al final del túnel», reconoce. Confía en que algún descendiente recuerde quienes eran y pueda recuperar lazos.