El bancario busca casetas tipo andaluz, pero empresarios lucenses aseguran que no valen y lo denunciarán

La Voz

A PASTORIZA

14 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Otra de las papeletas que Javier Irimia Carrera, el bancario de A Pastoriza, trata de resolver a toda prisa es el del alquiler de las casetas que necesita para proporcionar a quien se las vaya a explotar. Y en este asunto puede ser motivo de una nueva polémica.

Según fuentes de la hostelería lucense este hombre, que nada tiene que ver con el sector, busca casetas para alquiler. Supuestamente plantearía introducir algunas utilizadas en el sur de España porque serían más baratas que las que ofrecen en otros lugares, sin embargo algunos hosteleros de Lugo ya advirtieron que las bases de la subasta establecen una serie de condiciones para las instalaciones y que denunciarán cualquier incumplimiento por parte de Irimia.

Al de Meira le pidieron en Madrid 20.000 euros por una caseta que podría servir para el San Froilán. Parece que también le ofrecieron otra en Ciudad Real por la mitad. Podría decantarse por esta porque, al parecer, es la que más se adaptaría a las necesidades de la hostelera de su pueblo que le llevaría la gestión de una durante el próximo mes de octubre.

Las bases dicen que las casetas han de tener unas características de una construcción típica de feria, «non dun restaurante ao uso». En otro punto imponen que los acabados han de ser «acordes á actividade que se vai desenvolver, garantindo o ornato público así como a súa conservación e mantemento, procurando unha decoración ornamental que respecte a tipoloxía tradicional da feira galega e o seu contorno de implantación».

Añade también la normativa que la estructura deberá ensamblarse mediante soluciones metálicas o de madera, «combinando piares ou cimbras para o apoio de correas para a sustentación da cuberta de lousa ou imitación, que se resolverá a unha ou dúas augas».

Dicen también las normas del concurso que los exteriores han de estar pintadas con pintura plástica, en tonos claros y el interior decorado «en función do seu uso».

Valora pagar alquileres que oscilan entre los 10.000 y los 20.000 euros