Los vándalos forzaron una ventana, accedieron a su interior y lo dejaron «patas arriba»
28 ene 2018 . Actualizado a las 13:11 h.Sillas y mesas totalmente destrozadas, estanterías por los suelos, fluorescentes rotos, espejos reventados... En dos palabras: «Patas arriba». Así se encuentra el colegio Vilardíaz de A Fonsagrada tras la visita de los vándalos.
El centro -perteneciente a la Consellería de Educación y que lleva más de cinco años cerrado-, se utiliza como colegio electoral y puntualmente para celebrar reuniones.
Hace justo hoy una semana, fue objeto de visita de los vándalos. «A falta de completar o inventariado, os destrozos ocasionados rondan os 3.000 euros. Provocaron sobre todo moitos danos e menos mal que non se lles deu por prender lume nos libros, senón ardería todo edificio», indicó el alcalde, Argelio Fernández Queipo, que fue el encargado de interponer la correspondiente denuncia en el Cuartel del municipio.
Según explicó el regidor, los vándalos entraron por la parte trasera del colegio, forzaron una ventana y accedieron a las instalaciones. Una vez en el interior se dedicaron a destrozar el mobiliario e incluso hicieron una hoguera.
Luces encendidas
La voz de alerta la dio un vecino que pasó dos días seguidos por la zona y vio las luces encendidas. El domingo no le dio importancia porque pensó que se estaba celebrando una reunión, pero el lunes, al ver que las luces seguían encendidas dio la voz de alerta. Fue en ese momento cuando el regidor acudió al lugar y a continuación interpuso la denuncia.
Según relató el regidor, el colegio de Vilardíaz fue construido en el año 1983 y se abrió en el 1987. Nunca había sufrió un ataque de vandalismo como el de hace una semana. «O que non é propiedade de un hai que respectalo igualmente», concluyó, indignado, Argelio Fernández.