Lucho López, jugador lucense de fútbol sala: «Viví la época del Barcel Euro como un niño, entrenar con ellos fue lo máximo»

MILLÁN GÓMEZ LUGO

LUGO

 Lucho  López durante esta temporada en el Vitulano C5 Manfredonia
Lucho López durante esta temporada en el Vitulano C5 Manfredonia CEDIDA

El ala-cierre lucense ha competido esta temporada en la Primera italiana

05 jul 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Luis, Lucho, López García (Lugo, 1989) ha terminado su primera temporada en el extranjero jugando en el Vitulano C5 Manfredonia, de Primera División de Italia, después de seis años en el Burela FS, con el que jugó tres temporadas en Primera y marcó el gol del ascenso en 2024. Un cierre que puede jugar de alta muy fiable defensivamente, inteligente tácticamente, de piernas largas para ganar disputas e ir al cruce, así como cierta capacidad para sumarse al ataque. Jugó en el Muebles Caloto lucense en la temporada 2004-2025. Fue campeón de la Supercopa de España con el Lobelle de Santiago en 2011.

—¿Cómo surge esta opción de jugar en Italia después de seis temporadas en el Burela y toda una vida en Galicia y España?

 —Mi mentalidad era buscar una experiencia fuera de España, una experiencia en Asia, Tailandia o Japón. Lo que pasa es  que iban pasando las semanas y los meses y no salió nada que me gustase o una oferta concreta. Entonces, a finales de julio y casi agosto me salió esta opción de Italia. Me llamaron personalmente del club. Entonces, pregunté, todo estaba bien, era un club que más o menos cumplía. Al final, decidí venir aquí a Manfredonia. Como experiencia personal ha sido muy buena, como deportiva no tan buena. 

 —¿Cómo es el nivel de la Primera División italiana?

—La liga es muy física, muy física. Te encuentras jugadores fuertes, sobre todo grandes, pero a la liga le falta organización, los clubes son menos organizados que en España. Aquí en Italia tienen que mejorar en el aspecto de los pabellones porque muchos no tienen las medidas reglamentarias para jugar. La liga española está a años luz por delante de la italiana. A nivel económico, en Italia los equipos pagan mucho más, pero a nivel de estructura de clubes y a nivel deportivo está muy por encima de la liga española. Jugar en Italia y España parece un deporte distinto, hay una diferencia abismal. Los jugadores italianos también tienen una mentalidad muy diferente a los españoles. 

 —¿Cómo valora su rendimiento individual en la Primera División italiana y su adaptación al juego?

 Bastante buena. Me acogieron muy bien desde el primer día en el equipo y en el equipo. El entrenador tenía mucha confianza en mí. Me adapté muy bien. En la pretemporada y los primeros partidos estuve a un nivel bastante bueno. Después, con los problemas económicos que hubo, con la salida de jugadores, que no hubo casi ningún fichaje, al final acabamos descendiendo y acabamos como mal en general en sentido de que no había ningún proyecto deportivo. Había muy pocos mimbres para competir en una división como la Serie A (Primera División) italiana. 

—¿Cómo ha sido su vida en Manfredonia, en la costa, en la provincia de Foggia, en la región de Apulia?

 —Es increíble para visitar y para venir de vacaciones. Está muy bien porque tiene muchos pueblos que visitar, bonitos y la temperatura aquí todo el año, quitando el mes de diciembre e igual la mitad de enero, es increíble, es como la vida en el Mediterráneo. La gente es muy hospitalaria, sobre todo de Roma hacia el sur. Te tratan siempre muy bien ya de entrada. 

 —¿Cómo fue su adaptación con el idioma italiano?

 —Ya antes de ir a Manfredonia empecé a estudiar un poco, por lo menos para manejarme un poco, sobre todo con mis compañeros. Me encontré bastante bien hablando italiano con mis compañeros. Al final, terminé la temporada consiguiendo poder realizar tranquilamente una conversación con cualquier persona italiana. Entonces, bastante bien. 

 —¿Cómo fueron los impagos en el club?

 —Es importante que la gente lo vea, que valore clubes como Lugo Sala, que es ese tipo de club que es muy humilde, pero lo que cuenta es que cumplan y que compitan siempre sin pasarse. Por ejemplo, si Lugo Sala tiene 200 mil euros de presupuesto e inviertes un millón pues obviamente se equivoca. Empezó a haber problemas de impagos desde el primer día que llegué. El primer mes empezaron con los retrasos, ya no pagaban el sueldo completo, solo pagaban una parte. Ya empezamos así en septiembre. Desde septiembre a junio fue así. Pagaban igual un mes, pagaban como un anticipo, que es como le llaman aquí, que es una parte del sueldo. Iban pagando así anticipos hasta ahora. Entonces, es una deuda de seis meses. En enero casi desaparece el club. Lo normal es que todos los jugadores cobren diez meses de temporada. Al final nos deben seis meses. Estamos esperando e intentando que nos paguen lo máximo posible porque nuestra sensación es que el club va a desaparecer seguramente porque es una deuda muy grande. Entonces, la única solución que podemos encontrar es por medio de la asociación de jugadores de aquí de Italia y poder cobrar una parte de lo que se nos adeuda. Es la única vía posible que puede haber. 

 —Usted es cierre, pero también puede jugar como ala. ¿En qué posición ha jugado en Italia?

 —Jugué de cierre porque en el equipo no había ningún cierre además de mí. Solo era el único cierre especialista en la plantilla. Otro compañero mío jugó de cierre, pero no era cierre. Casi no éramos ni jugadores para jugar. Tenía que jugar un poco de todo.

 —¿Cómo valora sus seis temporadas en el Burela FS? Además, marchándose marcando el gol del ascenso. 

 —Burela fue mi segunda casa después de salir de Santiago. Estuve muy cómodo en Burela. En Burela siempre se portaron muy bien conmigo. Darle las gracias a José Luis (Sáez), que ahora se ha convertido en presidente, porque fue él que me llamó para ir a Burela y poder estar allí tantas temporadas. Entonces, contento por mi experiencia en Burela. Los seis años fueron de altibajos porque viví un descenso y dos ascensos. Fue de altibajos porque tuve diferentes lesiones. En cuanto a mi rendimiento, me esperaba que fuera mucho mejor de lo que hice allí. Pero contento por la experiencia vivida y, sobre todo, por la gente y por el trato de la gente, que nunca olvidaré. 

 —¿Cuáles fueron sus mejores momentos de forma en el Burela FS?

 —Seguramente mi primera temporada cuando llego a Burela. Después, también las dos últimas temporadas, rendimos a buen nivel, también por la exigencia de David Rial, es un entrenador muy exigente, no deja que te relajes, en el día a día está muy encima de ti y tú tienes que siempre dar siempre tu máximo rendimiento desde el lunes hasta el sábado y el partido. A nivel mental la última temporada, sobre todo los dos o tres últimos meses, acabé un poco cansado de tanta exigencia, de tanta competencia entre nosotros. Fue un motivo por el cual decidí no seguir en el Burela, no me sentí cómodo en esos últimos tres o cuatro meses y decidí buscar una nueva experiencia. 

 —¿Qué otros entrenadores le inspiraron durante su etapa en Burela?

 —Estoy muy agradecido a Juanma (Marrube) por llevarme a Burela y llamarme. David (Rial) y Juanma (Marrube) fueron con los que más a gusto estuve. 

 —¿Con qué compañeros se queda de esa etapa?

 —Sí que seguramente me quedo con los compañeros de las dos últimas temporadas en Burela (2022-2024). Me quedo con ellos porque más que compañeros eran como una familia para mí, eran amigos. Había una gran piña de jugadores y un gran grupo. 

 —¿Con qué momentos se queda de su carrera hasta el momento?

 —Con la Supercopa que ganamos con el Lobelle y también con mi primer partido de Liga cuando debuté. 

 —¿Cuál fue el entrenador que más le ha marcado?

 —Santi Valladares. Me quedo con él, sobre todo a nivel personal para siempre. Me influyó mucho en mi carrera deportiva, tanto cuando me llevaba a la selección gallega como cuando jugaba en Primera División. Destaco el nivel humano que tiene como entrenador y como persona, también en lo táctico. En el trato con el jugador es de los mejores. 

 —¿Siendo usted lucense de O Corgo cómo recuerda su etapa en la cantera y en el primer equipo del Barcel Euro Pobra de San Xiao? 

 —Cuando comencé tenía 15 años, a punto de cumplir 16. Fue una época de aprendizaje, de aprender de jugadores de nivel mundial, un nivel que ahora casi no ves en las principales ligas. Estoy muy agradecido a (José María Pazos) "Pulpis" porque fue una oportunidad de poder vivir un momento así, entrenar tan joven con jugadores de tanto nivel. Era una etapa diferente, era un fútbol sala también diferente, también se movían unas cantidades de dinero que hoy en día casi no se ven. Yo iba a entrenar y vivía a 10 minutos de A Pobra de San Xiao, que fue donde nació el club. Viví esa época como un niño, entrenar con ellos fue lo máximo para mí. Esa época la recordaré siempre. Fueron mis primeros pasos en el fútbol sala, también aprendí muchas cuestiones porque cuando entrenas con jugadores así, aunque no estés a su nivel, sí que aprendes muchas cuestiones. Entonces, sí que me valió para hacer una carrera deportiva a nivel profesional.

 —Usted fue campeón de España sub20 y sub18. ¿Cómo recuerda esas dos experiencias y esas dos generaciones?

 —Esas generaciones de Galicia tenían un nivel de fútbol sala grande. Por eso generamos esa generación y ganamos prácticamente dos campeonatos de España consecutivos, era como un boom del fútbol sala en Galicia. Sabíamos que no todos, pero sí gran parte de nosotros acabaríamos siendo profesionales. La recuerdo como una época bonita, sobre todo mi época juvenil porque es donde se ve cómo maduras, cómo creces y cómo vas subiendo el nivel desde el inicio hasta el final de temporada. Tú ves que das pasos gigantes para crecer como jugador y también te formas como persona porque eras muy joven y jugabas fuera de casa. Entonces, lo vives como una experiencia diferente. 

 —¿Dónde quiere jugar la próxima temporada?

 —Pues ahora mismo no sé. Mi pensamiento es volver a España. Mi pensamiento más próximo seguramente es jugar una temporada más. No sé dónde, pero sí jugar una temporada más porque la experiencia de este año en Italia no ha sido del todo buena, sobre todo a nivel deportivo. Busco otra temporada por la experiencia que he tenido en Italia, sobre todo a nivel deportivo. Ahora estoy esperando que me salga una propuesta que me compense seguir jugando. Si no me compensa, dejaré de jugar y haré otra vida que no es ni menos ni más bonita que la actual. 

 —¿En qué se ha formado más allá del fútbol sala?

 —Hice un ciclo de emergencias sanitarias. Lo hice para el día de mañana tener una salida, no me refiero a que vaya trabajar en eso, pero sí tener esa salida e involucrarme en la vida laboral. No sé si voy a trabajar de esto o no, pero no me disgusta. Entonces, seguramente sí.