El HULA creará un protocolo de cardio-oncología para evitar interrupciones en los tratamientos
LUGO
El nuevo enfoque, que pretende beneficar a los pacientes sin comprometer su salud cardiovascular, fue protagonista durante la primera Reunión de cardio-oncoloxía
13 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Profesionales de diferentes especialidades abordaron la creación de un protocolo de cardio-oncología en la I Reunión de cardio-oncoloxía, celebrada este martes en el hospital lucense. Con este enfoque se pretende evitar interrupciones en los tratamientos oncológicos y asegurar que los pacientes puedan beneficiarse de la máxima eficacia posible sin ver comprometida a su salud cardiovascular.
En él participaron los servicios de Cardioloxía, Oncoloxía médica, Oncoloxía radioterápica, Medicina interna y Atención Primaria que buscan mejorar la coordinación entre todos los profesionales implicados en el manejo del paciente y desarrollar protocolos locales de prevención, diagnóstico y tratamiento precoz de las complicaciones cardiovasculares asociadas a los tratamientos de cáncer.
El conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, puso el avance como ejemplo de los beneficios que tiene la medicina multidisciplinar durante la inauguración de la jornada, en la que estuvo acompañado por el delegado territorial de la Xunta, Javier Arias, y del gerente del área sanitaria, Ramón Ares.
Los especialistas destacaron la urgencia y necesidad de este nuevo enfoque, teniendo en cuenta que la toxicidad cardiovascular es un problema asociado a muchos de los tratamientos oncológicos. De hecho, estas terapias pueden triplicar el riesgo de eventos cardiovasculares a medio y largo plazo.
Las toxicidades cardíacas más comunes, el diagnóstico de la cardiotoxicidad o las vías de derivación en la cardiología oncológica abrieron la reunión El manejo cardiológico del paciente oncológico y la anticoagulación centraron las siguientes mesas en las que participaron, entre otros, las doctoras Marta Covela, Beatriz Pombo y Beatriz Carnero y los doctores Borja González y Lawrence Ribinsk.