El temporal azota Lugo: ríos desbordados, cultivos inundados y agua en viviendas

Uxía Carrera Fernández
U. CARRERA LUGO / LA VOZ

LUGO

Alberto López

La provincia registró más de 200 incidencias el fin de semana: «Hai vinte anos que non víamos isto así»

02 ene 2023 . Actualizado a las 12:45 h.

El primer día del año está dejando casi 80 litros de lluvia por metro cuadrado. El temporal empezó azotando a la parte oeste de Galicia en las primeras horas de este 1 de enero, pero por la tarde está dejando grandes estragos en la provincia de Lugo. El río Rato, en la capital, el Asma, en Chantada, o el río Sarria se desbordaron, algunas carreteras secundarias están repletas de balsas de agua y el agua inundó calles o los bajos de algunas casas.

La provincia de Lugo registró este fin de semana un total de 207 incidencias por el temporal. Prados y campos anegados, árboles o derrumbamientos en las carreteras que obstaculizan la circulación o viviendas o garajes inundados.

Hasta las 16.30 horas, en la ciudad de Lugo cayeron 52,8 litros por metro cuadrado. En Sarria ascendieron hasta los 61,4 o en Portomarín, 68,3. Pero la zona donde más lluvia se acumuló fue en el sur, especialmente en Chantada, con 77,4 litros por metro cuadrado, o en Pantón, con 79,1. 

El Rato, el Asma y el Sarria, desbordados

La alerta naranja por temporal en Lugo multiplicó el caudal de los ríos de la provincia. El Miño está en alerta en el concello de O Páramo y en prealerta en Sarria. En la ciudad de Lugo, inundó la zona de O Muíño. No fue el único torrente de agua que sobrepasó su capacidad, sino que el Rato llegó a desbordarse, afectando a los sumideros de la ciudad. Lo mismo pasó en Chantada, con el río Asma, que llevó el agua hasta inundar numerosas calles de la localidad. Hacia media tarde, también reventó el caudal del río Sarria.

Carreteras intransitables

Algunas vías secundarias de la provincia se convirtieron en grandes balsas de agua, siendo una continuación de los prados y los campos de cultivo que quedaron totalmente anegados. En varias parroquias de Láncara o  Sarria, como en Oleiros, Céltigos, Vilambrán o Manán, las carreteras quedaron totalmente cubiertas de agua. Complicando la circulación e incluso el acceso a algunos núcleos de población. De hecho, la Policía Local cortó la vía de acceso a Céltigos al desbordarse el río Sarria. «Hai vinte anos que non víamos unhas inundacións así», aseguraban los vecinos.

También destacaban que un mejor mantenimiento del cauce de los ríos habría ahorrado algunas inundaciones, puesto que la maleza se acumula y crea una especie de presa. Por ejemplo, en Manán, ante la inmediata inundación de un puente, los vecinos se pusieron a limpiar el cauce para evitar que el agua siguiese ascendiendo. 

Vecinos de Manán limpiando el río para evitar que el agua se estanque
Vecinos de Manán limpiando el río para evitar que el agua se estanque Alberto López

En Baleira, la vía LU-P-5401, junto a la localidad de Muíña, quedó cortada por un desprendimiento de tierra. También en el municipio de Carballedo, en la carretera N-540, cayó un muro sobre la vía pública.

Garajes, casas y negocios afectados

La crecida de los ríos y la acumulación de lluvia llevó el agua incluso hasta el interior de los bajos de las viviendas o los garajes, especialmente en los núcleos de población del rural. Pero también se vieron afectadas casas y negocios de la capital de Sarria. «No casco urbano polo momento circulase completamente pero xa hai agua en garaxes e negocios con agua. Se non para de chover vai haber problemas importantes», explicaron desde la Policía Local.

El Asma multiplica su caudal por 19 y provoca inundaciones en Chantada

El río se salió de su cauce y un torrente La zona comprendida entre este municipio y los de Pantón y O Saviñao fue la que registró mayores precipitaciones este 1 de enero en la Ribeira Sacra

Carlos Cortés

Las lluvias que empezaron el 31 de diciembre y continúan después de que haya anochecido el 1 de enero están provocando grandes crecidas en todos los ríos del sur de Lugo y algunos desbordamientos importantes. Chantada es la localidad de la Ribeira Sacra más afectada por estas inundaciones, que han obligado a cortar algunas calles y carreteras locales. Durante toda la tarde fue preciso además circular con precaución por muchas carreteras, sembradas de pequeños derrumbes, arroyos desbordados que las cruzan y embolsamientos de agua en la calzada. En Monforte, el Cabe estaba a punto a la seis y media de la tarde de alcanzar el nivel de alerta roja por riesgo de desbordamientos.

En el lado lucense de la Ribeira Sacra las precipitaciones más intensas se produjeron en el área formada por los municipios de Chantada, O Saviñao y Pantón. De hecho, la estación meteorológica de A Míllara, en Pantón, era a las cinco y media de la tarde la que más lluvia había recogido de toda la provincia, con 79,6 litros por metro cuadrado en las 12 horas previas. Por lo tanto, no es raro que fuese en algunas aldeas ribereñas de Pantón donde primero se empezó a deteriorar la situación. Es el caso de Atán, donde a media mañana se formaron torrentes que llenaron de agua el pueblo, inundaron casas y mantuvieron a los vecinos prácticamente incomunicados por carretera durante horas.

Mientras tanto, el caudal de los principales ríos iba creciendo de forma generalizada. A la una de la tarde, el Asma alcanzó un pico de 114 metros cúbicos por segundo a su paso por el casco urbano de Chantada. Para hacerse una idea de lo que eso supone solo hay que explicar que a la misma hora del día anterior el caudal en ese punto era de 6 metros cúbicos. En 24 horas, el río había incrementado 19 veces su tamaño.

El Asma llevaba toda la mañana por encima del umbral del riesgo naranja, pero en esos momentos ya había superado ampliamente el de alerta roja. El agua empezó a inundar la Alameda y la Policía Local optó por cortar al tráfico toda esa zona, incluido el puente de O Convento. En ese momento, estaban aparcados junto al parque de la Alameda una docena de coches que se quedaron atrapados allí hasta que el nivel empezó a bajar a partir de media tarde.

La canalización que encajona el Asma en la mayor parte de su tramo urbano lo contuvo por poco, pero no fue suficiente para impedir que entrase agua en las casas más cercanas al cauce en el barrio de O Convento. También se inundaron la parte más baja del paseo fluvial, algunas fincas urbanas cerca del puente de la antigua carretera a Ourense y el parque infantil de las piscinas municipales.

Al margen de la zona más próxima al Asma, también se registraron inundaciones en la avenida de Monforte. En el margen derecho de esa calle en sentido al centro, se formó un torrente que al pasar inundó fincas y viviendas y que cubrió la calzada en el tramo que pasa por delante del colegio Eloísa Rivadulla. El recinto del colegio se llenó también de agua. No hizo falta cortar la calle al tráfico.

Aguas abajo de Chantada y ya sin canalizaciones, el Asma anegó una amplia zona alrededor de su cauce. Por segunda vez en menos de dos semanas, fue preciso cortar al tráfico la carretera que comunica San Pedro de Líncora con la LU-533 en la zona de Ponte Meixide. La última vez ocurrió el 20 de diciembre, cuando otras lluvias intensas dejaron 58,8 litros por metro cuadrado en 12 horas.