Juzgado un empleado de banca de Carballedo que retiró 170 veces dinero de sus clientes para quedarse con hasta 123.000 euros
LUGO
Él y un socio admitieron ser culpables de estafa y otro de apropiación indebida, pero no quisieron llegar a un acuerdo con el banco para no pagar 42.000 euros de indemnización
24 nov 2022 . Actualizado a las 20:01 h.Un empleado de una entidad bancaria de Carballedo (Lugo) y su supuesto cómplice fueron juzgados este jueves en la Audiencia Provincial de Lugo por, presuntamente, estafar hasta 123.000 euros a seis clientes de esta sucursal entre los años 2011 y 2015. La Fiscalía les atribuye un delito continuado de estafa agravada y otro de apropiación indebida.
El Ministerio Fiscal sostiene que, en algunas ocasiones, el principal acusado, para el que pedían casi nueve años de prisión, actuó con un cómplice que era cliente del banco y familiar de una de las víctimas, el segundo acusado del juicio, para el que pedían dos años de prisión.
En el juicio, ambos admitieron ser autores de estos delitos y llegaron a un acuerdo con la Fiscalía para que rebajase su petición de pena contra ellos. De los nueve y dos años que se pedían para ellos en el escrito de acusación, la fiscal aceptó rebajarlos hasta un año y seis meses de cárcel para el empleado de banca (más 1.080 euros de multa), y en un año para su socio (más 540 euros de sanción).
No quieren pagar toda la indemnización
Sin embargo, el acuerdo no se hizo oficial porque el abogado de la entidad bancaria para la que trabajaba el principal acusado, que se personó como perjudicada en el juicio, no quiso conformarse con esa pena. La empresa, que actúa como acusación particular porque tuvo que indemnizar íntegramente a los perjudicados con su dinero cuando fueron estafados, pide ahora que los acusados le devuelvan estas cantidades.
El empleado de la entidad sí aceptó devolver los 84.000 euros que le solicitaron, pero su socio y el abogado de este rechazaron aportar 42.000 euros más de manera solidaria a la empresa, tal y como solicitaba la acusación particular.
Por lo tanto, todo quedó acordado con la Fiscalía, pero se dejó en manos del tribunal de la Audiencia Provincial decidir si los acusados deben aportar solidariamente esa cifra para dar por indemnizada a la entidad bancaria. Eso se resolverá con la publicación de la sentencia, aunque la pena de cárcel no cambiará en ningún caso, ya que la acusación estuvo de acuerdo con la fiscal en ese sentido.
El relato de hechos de la Fiscalía
El acusado llevaba 31 años trabajando en banca cuando, el 28 de junio del 2011, lo destinaron a una sucursal situada en el municipio de Carballedo. La Fiscalía sostiene que entre esa fecha y el 26 de octubre del 2016, sustrajo más de 123.000 euros de las cuentas bancarias de seis clientes de la entidad para la que trabajaba. Para hacerlo, la mayoría de las veces simplemente retiraba dinero de las cuentas para quedarse con él. En una ocasión, se apoderó de un ingreso en metálico que había hecho una de las víctimas y que él no llegó a registrar. Le atribuyen unas 170 operaciones de este tipo.
Todas las víctimas son personas de edad avanzada que no utilizaban la banca electrónica y que apenas hacían más operaciones financieras que la retirada periódica de dinero de sus pensiones mediante la presentación de sus libretas bancarias. La acusación sostiene que el sospechoso se aprovechaba de su confianza para hacerles firmar las retiradas de fondos mediante engaños y sin que supieran que en realidad les estaba quitando dinero. En cuanto a su cómplice, la Fiscalía dice que iba al banco para, en connivencia con él, sacar dinero de las cuentas de dos clientes. Uno de ellos era familiar suyo.
El principal implicado fue despedido del banco cuando se descubrió lo que había pasado. Será la Audiencia de Lugo la que decida la indemnización pertinente para la entidad bancaria.