De norte a sur, la naturaleza ofrece alternativas para disfrutar y vivir el cambio de estación
14 oct 2022 . Actualizado a las 23:07 h.Bosques para recorrer, sentir, disfrutar o caminar. Senderos que permiten vivir, en primera persona, la llegada del otoño y experimentar el fresco que avisa de la próxima llegada del invierno. De norte a sur y de este a oeste, Lugo se posiciona como la provincia de los parajes naturales por excelencia. Rural, auténtica y accesible; etas son algunas de las alternativas aptas para estos días otoñales.
norte
Terra Chá. Al norte de la ciudad de Lugo, Guitiriz esconde un bosque repleto de carballos en el que se esconde un viejo santuario. De refilón, el río Parga atraviesa un puente de libro al que se llega a través de la N-6. En pleno Camino Norte, por el lugar también abundan peregrinos que buscan disfrutar de la paz de la naturaleza descansando unos minutos en el lugar. El puente sobre el Parga es de estilo gótico esconde un panel que oferta las distintas rutas alternativas por el lugar. Seis opciones en función del tiempo y gustos para entrar en un espeso bosque que llega también a la fuente de San Alberte, a cuya agua se atribuyeron en otros tiempos poderes curativos.
sur
O Courel. La Devesa da Rogueira es la joya de la corona, pero son muchos los que aún no se adentraron en este bosque atlántico para disfrutar de una experiencia sensorial completa. Numerosas rutas y senderos permiten conocer el bosque en profundidad, y disfrutar también de una gran diversidad de fauna y flora, puesto que aquí conviven más de 800 especies autóctonas de árboles y plantas. En esta zona de terrazas glaciares hay paneles que guían a los excursionistas, así como opciones para los que apuesten por las rutas de alta intensidad.
centro
El bosque urbano de As Gándaras. En el polígono industrial de As Gándaras, a los pies de Lugo, se esconde un bosque de frondosos, un souto que el ayuntamiento ha decidido explotar con talleres y actividades, pero que también está abierto al público los viernes, sábados y domingos entre las 9.30 y las 19.30 horas. Con una parcela de cuatro hectáreas dedicadas a frondosas y silvicultura y otras cinco para un arboretum de especies leñosas, numerosas especies conviven con plantas medicinales y aromáticas, entre muchas otras.
este
Os Ancares. Es los montes de Os Ancares se esconden miles de rincones por explorar. Bosques autóctonos, caminos transitados por los últimos mayores que aún llevan al ganado al monte y aldeas que permiten caminar y entender cómo funciona el ecosistema propio de esta tierra. Una de las alternativas es la ruta que llega al pico de Tres Bispos, y que parte del viejo albergue Ancares o de Vilarello. Caminos de tierra y vistas de infarto permiten llegar a una cima desde la que, parece, se vislumbra todo un mundo.
A Fonsagrada. A los pies del concello está una de las cascadas más altas de Galicia, la Seimeira de Vilagocende, a la que se llega por una ruta de aproximadamente dos kilómetros por un camino agradable, ancho y con un suave desnivel.
