Intentar agredir a un agente forestal con un cuchillo de matanza sale por 60 euros

Uxía Carrera Fernández
U. CARRERA LUGO / LA VOZ

LUGO

Concentración de agentes forestales y medioambientales en Lugo
Concentración de agentes forestales y medioambientales en Lugo u.c.

Profesionales del sector medioambiental se concentraron en Lugo y varios puntos de Galicia para reclamar medidas de seguridad

09 feb 2022 . Actualizado a las 14:23 h.

Agentes de la Consellería de Medio Rural y de Medioambiente se concentraron este miércoles en Lugo para reclamar medidas que les permitan trabajar con seguridad. Urgen la actualización de su reglamento para evitar agresiones como la sucedida esta semana en Betanzos, en la que le destrozaron la cara con una horca a un agente.

Los trabajadores públicos de este sector llevan «15 años esperando por el reglamento autonómico del cuerpo», como explica uno de ellos. Y también por la Ley Básica de Agentes Medioambientales a nivel estatal. La falta de esta normativa significa que no tienen regulado cómo hacer sus labores, incluidas las situaciones en las que pueden sufrir una agresión mientras trabajan. No tienen medios de defensa, pasos a seguir ni protocolo. «Dinnos que non nos metamos en líos, que se pasa algo chamemos á Garda Civil e que esperemos a que interveñan», asegura uno de los agentes que acudió a la concentración, José Ramón Fernández. Sin embargo, destacan que con estas pautas no se tiene en cuenta que ellos muchas veces trabajan en sitios sin cobertura y que, en caso de dar contactado con los cuerpos de seguridad, tardarían en llegar porque suelen acudir a pistas forestales en el medio del monte. «No caso de Betanzos, por exemplo, tardaron unha hora e cuarto en chegar», aseguran. 

Para enfrentarse a las situaciones de conflicto, los agentes ya no cuentan con armas, ya que se las quitaron hace unos años. Tras la última grave agresión de Betanzos, los trabajadores vuelven a pedir formación en seguridad y también medios materiales. Además, cada vez es menos frecuente que trabajen en pareja. «Na Consellería de Medio Ambiente aínda imos dous pero os compañeiros de Medio Rural van solos», apuntan. Por lo que reclaman que siempre se vaya acompañado. «Quitáronnos todo e estamos indefensos, todo o que temos agora é un bolígrafo»

Las amenazas e intentos de agresiones son algo frecuente, como destacan todos los agentes. Por ejemplo, a uno de ellos lo intentó agredir un vecino de Guitiriz con un cuchillo de matar cerdos, lo persiguió y tuvo que escapar como pudo en coche. El agente denunció y fue tipificado como «falta leve» con una multa de dos euros al día durante 30 días, en total, 60 euros. En otro caso, un cazador intentó golpear a otros dos agentes con una estaca en la cabeza tras empujarlos, lo que conllevó para el agresor una multa de 6 euros al día durante 15 días, es decir, 90 euros. «Para nosotros es el pan de cada día que nos insulten, que nos falten al respeto o nos intenten agredir. Pasó con cazadores, vecinos, pescadores, maderistas..», relatan. Igual que se ven en estas situaciones agentes de la Guardia Civil o la Policía, alegan, ellos también necesitan medidas de protección porque este tipo de agresiones llegaron incluso a terminar en el asesinato de dos compañeros en Cataluña.

En la provincia de Lugo, hay unos 170 agentes forestales o medioambientales. Además de las medidas de seguridad también están a la espera de mejorar su situación laboral ya que explican que «se sacan oposiciones cada diez años, hace once que no se hizo un concurso de traslados y no hay agentes con plaza sino que están en comisión de servicio».