El instituto local desarrolla un proyecto con el apoyo de Voz Natura
16 nov 2021 . Actualizado a las 10:43 h.Monitorizar la calidad ecológica de las aguas del Ulla a su paso por Monterroso es el principal objetivo de un proyecto que se desarrolla en el instituto de educación secundaria y profesional de este municipio con el apoyo de Voz Natura, un programa de La Voz de Galicia desarrollado por la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre y patrocinado por Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, la Diputación de A Coruña, la Fundación Alcoa, El Corte Inglés y la Fundación Ramón Areces. Durante este curso, los alumnos recogen y analizan muestras de agua del río, una actividad en la que este centro ya cuenta con tres años de experiencia.
Dentro de este programa, un grupo de alumnos de cuarto curso de ESO estuvieron el pasado viernes tomando muestras en el cauce. Según explica Adrián González, profesor de biología y geología y coordinador del proyecto, los muestreos se hacen en dos tramos diferentes —aguas arriba y aguas abajo de la estación depuradora local— y los análisis son de dos tipos. Por un lado, se efectúa un análisis fisicoquímico que tiene en cuenta cuatro factores: acidez, temperatura, concentración de oxígeno y conductividad. «Estas análises indican se a calidade da auga é boa ou mala, pero o resultado só se pode aplicar ao momento concreto que se efectúan as análises», puntualiza.
Para evaluar la calidad ecológica del agua a más largo plazo, los alumnos estudian también muestras biológicas, principalmente insectos que viven en el río durante su período larvario. La recogida se hace con unas mangas semejantes a cazamariposas que se deslizan por el fondo del cauce. En las redes, junto con una cierta cantidad de arena y piedrecillas, quedan atrapados insectos de diferentes especies que los estudiantes identificarán después en el laboratorio del centro educativo. La presencia o la ausencia de determinadas especies puede indicar si el estado ambiental del río en ese tramo es satisfactorio o bien si se registra algún problema.
Vertidos contaminantes cuyos efectos se siguen notando en la fauna fluvial durante meses
Los controles de calidad ecológica de las aguas como los que llevan a cabo los alumnos del instituto de Monterroso ponen de relieve los prolongados efectos que pueden tener los vertidos contaminantes en la fauna fluvial. El profesor Adrián González apunta a este respecto que en un monitoreo realizado por los estudiantes del centro en octubre del año pasado se notó una disminución en la presencia de los insectos acuáticos más sensibles a la degradación ambiental en el tramo del Ulla situado aguas abajo de la depuradora de Monterroso. «Todo parecía indicar que ese tramo de río sufrira recentemente algún episodio de contaminación, así que os rapaces puxéronse a investigar para tratar de descubrir o que podía ter sucedido», explica.
La búsqueda que realizaron los alumnos dio resultado, gracias precisamente a una noticia que se había publicado en La Voz el mes de junio anterior. «Nesa información dicía que a depuradora de Monterroso tivera un fallo técnico e que durante un certo tempo estivera devolvendo ao río auga sen depurar», señala el profesor. «Os controis que fixemos mostraron polo tanto que os efectos de ese episodio contaminante aínda seguían notándose na fauna fluvial cando xa pasaran tres meses desde ese suceso», agrega.
En los análisis que se están efectuando durante el actual curso académico actual se tratará de determinar si los efectos de aquel vertido contaminante se siguen percibiendo todavía en la fauna fluvial del tramo afectado, algo que no se puede descartar de antemano. «Os ríos terminan por recuperarse destes vertidos, pero o proceso de recuperación pode levar moito tempo», concluye González.
Identificación de insectos acuáticos sensibles a la degradación ambiental
Tras la recogida de muestras biológicas en el Ulla, los alumnos del instituto de Monterroso examinan con lupa en el laboratorio las larvas acuáticas, una labor que requiere bastante tiempo, ya que en el río puede haber muchas especies distintas. «Hai insectos que soportan ben as augas contaminadas, pero hai outros que non, e o que nos interesa é detectar a presenza desas especies que só poden vivir en augas limpas e que nos serven como indicadores ambientais», indica Adrián González. Entre las especies más sensibles a la contaminación —agrega— están las efímeras y los tricópteros.
Si en las muestras recogidas en el río no se encuentran ejemplares de estas especies más vulnerables, dice asimismo el profesor, es señal de que el medio ambiente fluvial está sufriendo alguna agresión. «Cando hai vertidos contaminantes, eses insectos morren e durante un tempo só podemos encontraremos na zona afectada exemplares das especies máis resistentes», apunta.
Elaboración de un informe
Con los datos recogidos en los muestreos que se lleven a cabo en el Ulla durante el presente curso, los alumnos del instituto elaborarán un informe en el que expondrán en detalle los resultados de su investigación. Además, está previsto elaborar unos carteles divulgativos sobre la necesidad de proteger la calidad ecológica del río que se entregarán al Ayuntamiento de Monterroso y a una asociación local de pescadores.
