La Policía Nacional sorprendió a uno vendiendo Trankimazin en la Fonte dos Ranchos, y a otro realizando una venta de hachís en A Piringalla
25 may 2021 . Actualizado a las 10:06 h.Funcionarios de la Policía Nacional adscritos a la Comisaría Provincial de Lugo, encargados de las investigaciones relativas a la salud pública, así como a los delitos relacionados con el patrimonio, han detenido a dos varones, de mediana edad, con amplios antecedentes, por sendos delitos de tráfico de drogas, reclamación judicial y hurto, respectivamente.
Una de las detenciones se produjo durante la investigación de un punto de venta de sustancias estupefacientes en la zona de la Fonte dos Ranchos, donde los policías pueden observar cómo el ahora detenido realiza una venta de pastillas de Trankimazin a una compradora. Por este motivo, el vendedor es detenido de forma inmediata. Una vez en dependencias policiales, en aras a la realización del correspondiente atestado, se le identifica plenamente y se comprueba a través de las bases de datos de la Dirección General de la Policía de que le consta una requisitoria de un juzgado de Vigo, por un robo con fuerza.
Al tiempo y en el mismo día, se detiene en la zona de A Piringalla, con la Avenida da Coruña, a otro varón por tráfico de drogas, ya que se estaba controlando desde hace unas semanas el incremento de actividad de personas con aspecto toxicómano que deambulaban por la zona, en atención a las demandas vecinales y de los comerciantes. Cuestión que ya la semana pasada dio lugar a la detención de otro varón por tráfico de drogas, en la zona de la Medusa. En esta ocasión, se trataba de venta de hachís en el propio domicilio, al que acudían los compradores para hacerse con la dosis correspondiente, por lo que la investigación fue más complicada de cara a conseguir las pruebas necesarias que vincularan al detenido con el tráfico de drogas. Finalmente fue interceptado realizando una venta de hachís, motivo por el que fue detenido y trasladado a dependencias policiales.
Ya en dependencias policiales, se instruye el correspondiente atestado, al tiempo que por parte de los policías encargados de la investigación de los delitos contra el patrimonio, se le imputa otro hecho. En este caso, un hurto de 800 euros, realizado en un bar de la capital, en el mes pasado, el cual fue esclarecido una vez se analizan todas las pruebas e indicios recogidos en el lugar de la comisión del delito.
Los detenidos, una vez son puestos a disposición judicial, quedan en libertad a la espera del correspondiente juicio.