Cortes de luz o árboles saturados: el efecto de los 2.000 pollos de cigüeña de la provincia de Lugo
LUGO
La Sociedade Galega de Historia Natural, encargada del censo, insiste en la necesaria adaptación de la red eléctrica
22 mar 2021 . Actualizado a las 12:27 h.El número de cigüeñas en la provincia de Lugo comienza a ser «muy preocupante», tal y como asegura desde la Sociedade Galega de Historia Natural, la encargada de hacer los censos de estas aves. Pero la preocupación no es por la cantidad de animales, sino por la falta de adaptación de los espacios donde se establecen. Un problema bastante grande especialmente en los meses de marzo y abril, porque es la época de construcción de nidos. Esto provoca árboles saturados con peligro de caída de ramas y cortes de luz, que en O Páramo, por ejemplo, llevan produciéndose durante dos semanas.
El último censo internacional de cigüeña en Galicia se realizó en el 2004. Entonces, en la provincia de Lugo se notificaron 142 nidos ocupados. En el 2020 se actualizó por primera vez aquel registro y los nidos ocupados ascendieron a 755, aunque los detectados en total fueron más: 845 y 1.992 pollos. «El gran crecimiento es incuestionable», afirma la coordinadora del censo, Nancy Blanco. La comarca con mayor número de pajareras es la de Lugo, con 276, seguida de cerca por A Terra Chá, con 250 y después, la de Sarria, que tiene un total de 129.
Pero ha sido especialmente en los últimos tres años cuando estas aves han colonizado decididamente la provincia, yendo en dirección norte y con mayor incidencia en la comarca de Sarria. Se trata de las denominadas cigüeñas nidificantes y se caracterizan porque crían a sus cuatro o cinco pollos, en este caso en Sarria. Estas crías en un período de dos o tres años vuelven a su lugar de origen a nidificar. «Son animales muy familiares, por lo que se anexan en lugares cercanos», explica Blanco. Es decir, «las cigüeñas han venido para quedarse». Además, son muy interesadas, como expone Blanco, por lo que si han decidido establecerse en estas comarcas de Lugo es porque tienen alimento suficiente.
Uno de los lugares predilectos para construir los nidos son las instalaciones eléctricas, que con la caída de una rama ya pueden generar grandes cortes de luz. Esto es, por ejemplo, lo que tiene enfadados a los vecinos de O Páramo, que sufren apagones de varias horas. La compañía eléctrica Naturgy afirmó que las causantes eran las cigüeñas. Estos animales han cambiado sus tiempos, de manera que llegan en diciembre y a finales de julio han desaparecido prácticamente todas. Durante estos meses está prohibido y castigado por el Código Penal la destrucción o la retirada de los nidos.
En el caso de O Páramo, Naturgy ha decidido instalar los denominados «salvapájaros», que son unos aparatos disuasorios. Nancy Blanco recalca que, además de que los elementos con pinchos están prohibidos, suponen «pan para hoy y hambre para mañana». «Las cigüeñas son muy testarudas, aunque retiren un nido, a los tres o cuatro días van a volver. Lo único que consiguen es hacerle daño al animal», explica. Desde la Sociedade Galega de Historia Natural insisten en que, una vez pasados los meses de nidificación, la compañía eléctrica debe adaptar la red a estas aves. «Que las cigüeñas conviven con nosotros ya está demostrado tras ver el censo multiplicado de los últimos años; hay que mentalizarse y poner soluciones». La alternativa que sugieren desde la sociedad es la instalación de plataformas elevadas que eviten el contacto del ave con el poste eléctrico.
Las estancias escogidas por estas aves son cíclicas, «por ejemplo, en A Terra Chá hubo bastantes más, pero se han ido moviendo». Aun así, la tendencia general, por el momento, es que siga aumentando el censo, por lo que «hay que ponerse al día en materia de prevención y protección», sentencia Blanco.