Asociaciones de propietarios de monte de ambos concellos se unen
11 feb 2021 . Actualizado a las 09:21 h.La prohibición de plantar eucalipto nitens en Castroverde y Baralla, derivada de criterios de ordenación forestal de la Xunta, acabará en los tribunales. Las respectivas asociaciones de productores de ambos municipios han creado una plataforma, que agrupa a unos mil propietarios, unos 600 en el primer municipio y 400 en el segundo. La nueva asociación ha contratado los servicios de un gabinete jurídico, y los informes que maneja son, de entrada, favorables.
La plataforma integra propietarios pequeños y medianos. La superficie media de cada uno anda por las seis o siete hectáreas, aunque hay algunos que tienen 20 o 30 hectáreas de terreno forestal. Las dos mencionadas asociaciones se crearon en el 2017, y su constitución tuvo que ver con el problema que ahora se presenta de nuevo, la prohibición de plantar eucalipto nitens. Entonces se planteaba ya esa posibilidad, aunque los planes de la Xunta no se hicieron realidad hasta hace unos meses.
El punto de partida de la plataforma sobre la política forestal es el respeto a los criterios municipales: no se aspira a la creación de un monocultivo de eucalipto sino a posibilidad de poder plantarlo allí donde el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) lo permite. En un municipio como Castroverde, hay terrenos delimitados como zonas de producción forestal y otros aparecen catalogados como zonas de protección forestal. Según fuentes de la plataforma, en Castroverde alrededor del 20% del terreno está hoy dedicado a plantaciones de eucalipto. No hay una parroquia -el municipio tiene 37, en una superficie total de 173 kilómetros cuadrados- que destaque en cuanto a plantación, sino que la presencia de eucalipto se reparte por todo el ayuntamiento, con un aumento que, según la plataforma, no ha sido mayor que en otros concellos.
Perjuicio
Mientras tanto, hay alcaldes de municipios de la zona afectada por la prohibición que se muestran contrarios a la postura de la Xunta o dispuestos a tomar una decisión en los próximos días. El alcalde de Navia de Suarna, José Fernández (PSOE), no ocultó su malestar con la actitud de la Xunta: en su opinión, es una muestra más del comportamiento de la administración autonómica, que, dijo, siempre acaba perjudicando a los ayuntamientos y a los vecinos.
Por un lado, Fernández no solo defiende que los dueños de montes decidan plantar eucalipto, sino que destaca las consecuencias: «Se os particulares teñen beneficios económicos, aos concellos iralles mellor», afirma. Por otro, considera que la prohibición de plantar eucalipto nitens acaba por convertirse en una discriminación. «Se o eucalipto non se pode plantar nalgunhas zonas, haberá que compensar», asegura. En municipios como A Fonsagrada, afectados también por la prohibición, la postura municipal no está por ahora tan definida: el alcalde, Carlos López (PSOE), afirmó que estos días se estaba trabajando en proyectos de obras relacionadas con el Plan Único, aunque próximamente sí se analizará este asunto.
Por su parte, el alcalde de Castroverde, Xosé María Arias, está dispuesto a convocar alguna reunión con otros responsables municipales. El regidor alzó anteayer su voz contra la prohibición de la Xunta, y no dudó en manifestar que no tenía sentido establecer prohibiciones en un asunto que un ayuntamiento regulaba en su Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM). Arias, que mostró su disposición a colaborar con la plataforma de propietarios, ve conveniente que sea la parte privada la que asuma una postura protagonista en este asunto.
Ordenación
Fuentes de la Consellería do Medio Rural explicaron que la Lei de Montes de Galicia establece que todos los propietarios de montes en Galicia deben dotarse de un instrumento de ordenación y gestión forestal, imprescindible para aprovechamientos forestales o ventas de madera de tipo comercial. Una orden de la Xunta del 2014 establece «os modelos silvícolas ou de xestión forestal orientativos e referentes de boas prácticas forestais para os diferentes distritos».
Cuando la superficie no supera las 15 hectáreas, debe tenerse un documento de adhesión expresa «a referentes de boas prácticas e aos modelos silvícolas ou de xestión forestal xenéricos». Las parcelas que superen dicha superficie estarán obligadas a contar con otros instrumentos de ordenación o de gestión forestal.