La N-547 entre Guntín y Palas y el límite provincial con Melide y la N-640 entre Meira y Ribadeo siguen siendo las más peligrosas, según el informe EuroRap que elabora el RACC
21 dic 2020 . Actualizado a las 16:24 h.El Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) acaba de hacer público el informe EuroRap 2020 sobre siniestralidad en las carreteras de la red nacional. Para elaborar el análisis, el RACC ha contado con la colaboración del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana y la Dirección General de Tráfico.
Según los resultados del estudio, siguen siendo tres las principales vías de riesgo de la red del Estado en la provincia de Lugo, cualificados como tramos de máximo riesgo para sufrir accidentes de circulación. El peor está en la conexión entre la N-640, carretera de Asturias, y la N-634, en el municipio de Ribadeo. Está situado entre los los tramos más peligrosos de España, con un índice de accidentes mortales y de heridos de gravedad de los más elevados del país.El otro tramo de carretera de máximo riesgo es la vía N-547 entre Guntín y Palas de Rei.
También se sitúa en nivel negro buena parte de la A-6 entre los límites de Lugo y A Coruña, aunque hay más kilómetros del lado coruñés.
El RACC en su análisis ha analizado el período de accidentalidad entre los años 2017, 2018 y 2019. Ha estudiado los índices medios de intensidad de tráfico y el número de accidentes graves que se produjeron en ese período en todas las provincias de España. Lugo se sitúa en el puesto undécimo, con un 11 % de kilómetros tramos de carreteras nacionales con niveles negros (máximo riesgo) o rojos (medio-alto), cuando la media española se sitúa en el 9 %. Las provincia peor paradas del informe son Huesca y León con el 25 % de kilómetros muy peligrosos, quedando Ourense con el 18 %.
En la provincia de Lugo, además de los tres tramos antes citados, se sitúan en niveles rojos, de riesgos medio-alto de accidentalidad, la N-640 desde Meira hasta Trabada (recordemos que el tramo de Ribadeo es nivel negro). Toda esta carretera, especialmente entre Meira y A Pontenova, lleva años entre los puntos negros de la red estatal en Lugo. Otra carretera con un nivel rojo es la N-547 entre Palas y el límite provincial con A Coruña (Melide).
Luego hay varios tramos de carreteras nacionales con nivel naranja, con riesgo de accidentalidad medio: la carretera N-640 a su paso por los municipios de Monterroso y Antas de Ulla, la N-640 entre Lugo y Meira, parte de la N-120 entre el límite provincial con Ourense y A Pobra do Brollón (este fin de semana hubo ahí un accidente mortal) y la N-VI desde Lugo hasta Guitiriz.
Ya con nivel amarillo, de riesgo medio-bajo, se sitúa la N-634 entre Abadín y Lourenzá, la N-120 entre A Pobra do Brollón y Pantón, la circunvalación de la N-VI en Lugo, la N-540 desde Lugo hasta Chantada, la N-642 desde Barreiros hasta San Cibrao y la A-8 en O Fiouco. Con nivel verde, que significa baja intensidad de accidentes, está la N-VI desde Pedrafita a Lugo, la A-6 en el mismo tramo y la A-8 desde Baamonde hasta Vilalba y desde Lourenzá hasta Ribadeo.
Si se analiza el informe del RACC, los tramos más peligrosos de carreteras nacionales en la provincia de Lugo se ubican en carreteras con poco tránsito y con apenas carriles desdoblados. Porque aunque se produzcan más accidentes en vías como la N-120, la N-VI o la N-642 en la costa, su alto índice de movilidad reduce la capacidad de riesgo, mientras que la carretera N-640 entre Meira y Ribadeo y la N-547 entre Guntín y Melide apenas tienen tránsito, pero sus pocos accidentes son de carácter más grave.