Unos artesanos «agradecidos» ocupan los 22 puestos de una feria «segura»

LUGO

En cada caseta hay un punto de desinfección, de uso obligatorio
En cada caseta hay un punto de desinfección, de uso obligatorio Óscar Cela

Por primera vez, la Deputación no cobra a los artistas por exponer sus productos

04 oct 2020 . Actualizado a las 16:33 h.

La muestra de artesanía se estrenó este fin de semana con «más gente de la esperada» por los artesanos, como opinó Ana Novoa, de Tres Caracoles. Es una de las primeras actividades que inauguran el San Froilán más atípico. En cada caseta hay gel instalado y carteles que recuerdan mantener la distancia de seguridad. Para tocar cualquier producto, hay que desinfectarse las manos. Además, los artistas están satisfechos con las instalaciones, que son al aire libre. Hasta para observar los productos «la gente no se atreve a acercarse, se queda lejos», cuenta Mónica, de Mis Marinillas. La feria de arte contó con el ambiente típico del fin de semana, a pesar del tiempo irregular, e incluso tuvo la visita del concejal de Desarrollo Local y Empleo, Mauricio Repetto, que acudió para constatar que «la cultura puede ser totalmente segura».

Un total de 22 artesanos exponen este año sus creaciones. Una gran mayoría son artistas locales. La oferta es variada: cerámica, cuero, cestería, amigurumis o juguetes de madera. Todos los productos son únicos y en Artesanfroilán encuentran un hueco para «valorar lo hecho a mano», recalca Regal Cerámica, que vende las decoraciones del artista de Viveiro, Otero Regal. Pero entre todas las creaciones, este año había una nueva competencia: las mascarillas. Dos puestos incluyen ya este producto, aunque uno de ellos no es homologado. Por una parte, Mónica, de Mis Marinillas, fabrica mascarillas desde el inicio de la pandemia y ahora ya casi es su «producto estrella». Ana Nóvoa, de Tres Caracoles, inspirada en la situación, las crea como objeto de exposición.

Mis Marinillas ofrece 200 mascarillas distintas, que ya son un producto artesano más
Mis Marinillas ofrece 200 mascarillas distintas, que ya son un producto artesano más Óscar Cela

Este año, por primera vez, la Deputación permitió poner los puestos de manera gratuita. Un detalle que todos recalcan y, sobre todo, agradecen. Ceniza de papel, el taller de cerámica de María Sánchez, se estrenó este año en la feria y admite que «no tienen ninguna queja». La gratuidad supone una gran ayuda en un año complicado y en especial para la artesanía, «que ya de por sí es un producto difícil de vender».

Instagram: el nuevo escaparate

La gran mayoría de los artesanos expuestos agradecen la ocasión de tener trato con el público porque la mayor parte de su actividad tiene lugar en la red. Isabel Carril, que realiza cerámica de autor, explica que recibe numerosos encargos por redes sociales. Tener las nuevas colecciones a punto y actualizadas en la web se convirtió en un trabajo más. Durante esta pandemia, la autonomía de los artesano les permitió seguir el ritmo. Idoia Cuesta, que vende sus productos de cestería contemporánea a través de su web, trabaja desde hace años con grandes marcas, como Loewe. La capacidad de respuesta de su pequeño taller destacó por encima de los grandes proveedores, que tuvieron que parar su actividad. En Artesanfroilán presenta su nueva colección Salix, unos productos de mimbre dedicados a la hostelería.

Idoia Cuesta, Premio Nacional de Artesanía, presenta su nueva coleccion, Salix
Idoia Cuesta, Premio Nacional de Artesanía, presenta su nueva coleccion, Salix Óscar Cela