El turismo de la Ribeira Sacra resiste mejor que la playa y el Camino de Santiago

Carlos Cortés
Carlos Cortés MONFORTE / LA VOZ

LUGO

Un grupo de turistas frente a la catedral de Lugo el pasado 29 de agosto
Un grupo de turistas frente a la catedral de Lugo el pasado 29 de agosto ALBERTO LÓPEZ

La cifra de turistas cae el doble en el Camino Francés y la comarca de A Mariña

07 sep 2020 . Actualizado a las 10:22 h.

El balance turístico del verano del coronavirus en la provincia de Lugo no estará completo hasta que se conozcan los datos de ocupación en el mes de agosto, pero los de julio ya apuntan algunas pistas fiables. Las cifras de julio dibujan el escenario de caída generalizada que ya se esperaba, pero en el detalle y por zonas hay números significativos. El primer mes fuerte del verano para el turismo se saldó este año con un 60% menos de clientes para los hoteles de la provincia. El descenso es similar en el centro de Lugo y en la comarca costera de A Mariña, pero en estas dos zonas es el doble que en la Ribeira Sacra.

Las estadísticas oficiales de la Xunta sobre el número de viajeros que pasan por los establecimientos hoteleros ofrece información territorializada en la provincia de Lugo solo para tres grande áreas turísticas: la Ribeira Sacra, A Mariña y Lugo central, una zona esta última que incluye la ciudad de Lugo y también las comarcas de Sarria y A Ulloa, donde el peso fundamental del negocio hotelero lo aportan los peregrinos que llenan todos los años la ruta francesa, el más popular y concurrido de los caminos a Santiago. La fuerza de la ruta jacobea hace que la que más viajeros mueve sea siempre Lugo Central. En el segundo puesto suelen turnarse A Mariña y la Ribeira Sacra en función de la época del año. El invierno, la primavera y el otoño es normalmente para la Ribeira Sacra y el verano para A Mariña.

De acuerdo con estas estadísticas, en este mes de julio pasaron por la provincia de Lugo un total de 30.676 viajeros. El mismo mes del año anterior habían sido 78.449, así que este año han sido 47.773 menos, una caída de sesenta puntos porcentuales. Lideran el bajón las comarcas de A Mariña, con un 67% menos; y los municipios del centro de Lugo, con una pérdida del 65%. La Ribeira Sacra también pierde visitantes con respecto a julio del 2019, pero con mucha menos fuerza porque cae un 35%.

La crisis del coronavirus parece estar haciendo ganar peso turístico a la Ribeira Sacra en el conjunto de la provincia de Lugo. En cifras absolutas, el centro de Lugo volvió a ser el pasado mes de julio la zona que más visitantes atrajo, con 13.890, pero en el segundo lugar no estuvo esta vez A Mariña. Por primera vez en un mes de verano, la Ribeira Sacra sumó más turistas (8.885) que las playas de A Mariña (7.901). Hay que tener en cuenta que los municipios con más infraestructura hotelera de A Mariña sufrieron entre finales de junio y hasta bien entrado julio un brote de coronavirus que obligó a confinarlos durante días. Los datos de agosto probablemente sean mejores para esa zona.

Mucho peor para los que depenen más del turismo extranjero

La envergadura de la caída de visitantes en las comarcas por las que pasa el Camino Francés parece directamente relacionada con la importancia que el turismo extranjero tiene dentro de las rutas jacobeas. Un 30% de los turistas que pernoctaron en julio del año pasado en el centro de Lugo procedían del extranjero. Los visitantes llegados de otros países son solo son el 17% del total en A Mariña y el 19% en la Ribeira Sacra.

El turismo entre países es el que más ha sufrido este año en toda Europa a causa de la pandemia y en los alojamientos que viven en mayor o menor medida del Camino de Santiago el impacto ha sido enorme. La demuestra que el pasado mes de julio el número de turistas extranjeros que hicieron noche en el centro de Lugo fueron 1.136. El año anterior había sido 12.348, diez veces más. 

Hotel cerrado, empleo perdido

Julio es el primer mes completo del que hay estadísticas turísticas desde el final del estado de alarma sanitario. Es por tanto el primer mes que sirve para medir el impacto del confinamiento en los negocios del sector. Y resulta curioso constatar que en el recuento de bajas es A Mariña la que sale mejor parada. En la costa, el número de alojamientos abiertos y el empleo asociado a ellos bajó poco este mes de julio en comparación con el mismo mes del 2019. Un año antes había 98 establecimientos hoteleros abiertos y ahora pasaron a ser 91. En el centro de Lugo eran el año pasado 170 y ahora 123; y en la Ribeira Sacra pasan de 67 a 49. La pérdida de empleo la lidera el centro de Lugo, con un 33% de caída (de 537 puestos de trabajo directos a 344), seguida de A Mariña, con un 33% menos (421 antes y 282 este año), y la Ribeira Sacra con un descenso del 8,4% (de 284 a 260).