Una denuncia paraliza la construcción en la esquina de San Roque con la Ronda da Muralla

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO

El solar de San Roque esquina con la Ronda lleva más de 16 años sin edificios tras el derribo de casas abandonadas
El solar de San Roque esquina con la Ronda lleva más de 16 años sin edificios tras el derribo de casas abandonadas Óscar Cela

Adega presenta un recurso cuando el solar tiene el informe favorable de Xunta e Icomos

04 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

En los últimos años han sido varios los pasos administrativos y políticos que terminaron para que los medios de comunicación dijesen aquello de «por fin» en referencia a que el gran solar que hace esquina entre San Roque y la Ronda tuviese una solución urbanística. Pero por el momento parece que la historia continuará y no se construirán los edificios proyectados para una parcela en la que se llevan más de 30 años esperando una solución.

Al parecer, una denuncia presentada en el Contencioso Administrativo de Lugo por el colectivo en defensa del medio ambiente Adega tiene paralizada la operación urbanística. La denuncia se presentó justo antes de que se decretase el estado de alarma, por lo que ni la propiedad del solar ni el Concello ni la Xunta conocen el contenido de la misma y están a la espera de saber las alegaciones que se exponen para presentar las oportunas contestaciones al juzgado, quien finalmente decidirá si la archiva o toma un acuerdo que volvería a iniciar parte del expediente.

Recreación de cómo quedará la esquina de San Roque con la Ronda
Recreación de cómo quedará la esquina de San Roque con la Ronda

La propiedad del solar, Hipólito S.L., aún no ha solicitado al Concello la licencia de construcción. Hasta que no se aclare y despejen las dudas legales podría ser una temeridad iniciar unas obras tan esperadas por los lucenses, ya que no solo afectan a la construcción de las nuevas viviendas si no también a la urgente urbanización del entorno, que incluye la peligrosa pasarela que conecta con Montero Ríos y la peatonalización de la parte alta del Carril das Flores, ya que es el Camino Primitivo.

Hipólito S.L pidió en el 2013 en el Concello la modificación puntual del Pepri. Desde el Ayuntamiento le solicitaron correcciones y tras varios meses volvió a presentar un nuevo proyecto, hasta que la junta de gobierno de junio del 2014 lo aprobó inicialmente.

La esquina de San Roque con la Muralla lleva 16 años sin edificios, tras el derribo de casas abandonadas
La esquina de San Roque con la Muralla lleva 16 años sin edificios, tras el derribo de casas abandonadas ALBERTO LÓPEZ

Pero cinco meses después Patrimonio lo tumbó y pidió al promotor un nuevo proyecto en el que incluyese algunas correcciones. Entre ellas tuvo que incluirse un retranqueo de cuatro metros de los edificios para que pudiese pasar el Camino Primitivo, que entra en el casco histórico por esta zona para cruzar a San Pedro.

Además, Patrimonio no aceptó unas escaleras previstas, ni unos soportales ni las alturas trazadas en el proyecto, quedando en tres volúmenes el proyecto final, y además con un tipo de arquitectura tradicional y respetuosa con la Muralla. Patrimonio también pedía la peatonalización del Carril das Flores.

Incluso, Icomos, el organismo que asesora a la Unesco sobre impactos en el patrimonio (aquí son dos bienes Patrimonio Mundial los afectados, la Muralla y el Camiño Primitivo) elaboró un informe en el que dio el visto bueno al proyecto final que presentó el constructor y que acordó finalmente por unanimidad el Concello en un pleno celebrado el 31 de enero del 2019. Solo faltaba la rúbrica a todo el expediente por parte de Urbanismo de la Xunta, que en julio del pasado año lo aprobó «pola súa integración e harmonización coa Muralla», en referencia a que suponía un menor impacto visual que en el proyecto de inicios de la década.

Ahora aparece un nuevo contratiempo en un solar derribado hace más de 15 años, que se convirtió en un basurero llenos de ratas y que afea tanto la primera imagen que tienen los peregrinos que llegan al centro histórico como a las vistas que hay desde el adarve, por no hablar de la peligrosa pasarela metálica (tiene casi 30 años).

Adega también se opone a la Ronda Este, las caldas junto al Miño, el Caudal Fest y el actual proyecto de playa fluvial

El colectivo ecologista Adega se ha opuesto en los últimos años a varias iniciativas que defiende el gobierno local, y más en concreto a proyectos que formuló o defiende la alcaldesa socialista desde el pasado mandato. Unos días antes de decretarse el estado de alarma presentó una campaña contra la construcción de la Ronda Este, que tiene que ejecutar la Xunta, pero que desde el PSOE se ha calificado como una obra urgente y necesaria para eliminar el tráfico que soporta la vía del Rato y para terminar la circunvalación de la ciudad. Adega se opone porque considera que habrá tala de carballos y castaños «tan necesario para reducir as emisións de gases de efecto invernadoiro de Lugo».

Pero también se opusieron a uno de los proyectos estrella de Lara Méndez, el de las caldas térmicas en el entorno del río, en el parque del Recinto Feiral, «que supón un gasto enerxético prescindible e que xerará emisións de CO2». También consideran que el lugar escogido para el Caudal Fest, en el citado parque, supone una agresión para un espacio que es Rede Natura 2000.

Y con respecto al proyecto de playa fluvial previsto cerca de la pasarela junto al fondo de Alfonso X, afirman que no es el lugar idóneo porque el caudal del Miño en esa zona está lleno de piedras y apenas tiene una profundidad de 50 centímetros, con poco calado en época de estiaje.

Adega también se opone a ende a la urbanización de As Saamasas «por innecesaria, tendo en conta a cantidade de vivendas desocupadas, e o impacto ambiental e paisaxístico que supón».