Casi siete millones de euros para siete contratos que buscarán soluciones a la niebla en la A-8

X.M.P. VILALBA / LA VOZ

LUGO

ALBERTO LÓPEZ

En terrenos cercanos a la autovía se probarán iniciativas contra la falta de visibilidad

24 ene 2020 . Actualizado a las 20:27 h.

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) formalizó, con una inversión de 6,9 millones de euros, los contratos de los servicios de investigación y desarrollo con los que se actuará para diseñar y experimentar soluciones a la niebla en el tramo de la A-8 cercano al alto do Fiouco (A Pastoriza).

Según los planes anunciados ayer por el Gobierno, esos contratos forman parte de la Fase 1, que a su vez se ha dividido en dos lotes. Los contratos del primer lote incluyen un sistema de colocación de balizas en los laterales de la vía con luz láser, un sistema de señalización horizontal con tecnología LED y un sistema de balizas inteligentes. Los contratos del segundo lote son un sistema con aspersores, la colocación de barreras aerodinámicas cortavientos, la instalación de estructuras de hormigón abovedadas sobre la calzada y la combinación de barreras estáticas y dinámicas.

Los proyectos del lote 1 van dirigidos a encontrar soluciones que permitan mejores condiciones para la conducción en días de niebla, muy habituales en esa zona de la A-8 de primavera a otoño. Los proyectos del lote 2 se orientan a buscar medidas que permitan aislar, eliminar o desplazar la niebla. En el tramo más cercano al alto do Fiouco la autovía llega a discurrir a 698 metros, la mayor altitud de todo su trazado.

El método previsto por el Gobierno consiste en un desarrollo por competencia, con lo cual se irán seleccionando las mejores soluciones para resolver el problema. En el pliego de condiciones redactado se recogen dos fases. En la primera cada adjudicatario efectuará los estudios y las demostraciones que indicarán la eficacia y la viabilidad económica y técnica de su propuesta. En cuanto a la segunda, los prototipos seleccionados se experimentarán en un terreno cercano al tramo de la A-8 que va de Arroxo (Lourenzá) y A Xesta (Abadín), de 16 kilómetros.