Calviño proclama en Lugo el compromiso del gobierno con las conexiones para Galicia

La campaña para el 10-N está en marcha y se nota. Esta mañana la ministra de Economía en funciones, Nadia Calviño, se ha acercado hasta Lugo acompañada del secretario general de los socialistas gallegos, Gonzalo Caballero, para hacer un llamamiento al voto y para ratificar el compromiso del gobierno de Pedro Sánchez con las conexiones de Galicia con el resto de España y con la economía de la comunidad.

«Está el compromiso de nuestro gobierno con la economía gallega y el desarrollo de esta comunidad autónoma», subrayó Calviño, que puso como muestra que se pronunció sobre un AVE que se ha convertido en arma arrojadiza entre unos y otros. «Ayer el Consejo de ministros sacó a licitación parte de las obras del tramo de Lugo a Ourense y en las últimas semanas ADIF sacó a licitación la electrificación de la línea. En definitiva, en este momento nuestro gobierno ya ha sacado a licitación unos 100 millones de euros, inversión muy superior a años anteriores».

Los plazos de la llegada de la alta velocidad a la comunidad han sido fuente de polémica, y Calviño también se pronunció al respecto. Quieren «cumplir con el plazo que nos hemos marcado para empezar a hacer las pruebas en el año 2020. No queremos que ningún tipo de retraso se derive de la falta de diligencia del gobierno de España, que está absolutamente comprometido con mejorar las infraestructuras para que las conexiones de esta comunidad autónoma, las de Galicia, con el resto de la península sean de primera clase y eso suponga un factor de dinamización, crecimiento, dinamización de empleo y de empresas para el conjunto de la comunidad».

También tuvo palabras la ministra en funciones para la industria, y más concretamente para la que se ve afectada por la transición energética. Recordó que recientemente se aprobaron ayudas por valor de 42 millones de euros para la provincia y trabajan para «buscar alternativas para la Terra Chá por el cierre de Endesa». E insistió en que «la ministra de Industria estuvo negociando hasta altas horas con los inversores para encontrar solución para las plantas de A Coruña; la ministra de Transición Energética se sienta con los representantes de los mineros... Somos un gobierno comprometido con los ciudadanos y con grantizar que se produce esta transición ecológica, que debe apoyar a los sectores más afectados».

Calviño hizo un llamamiento a la participación y al voto al PSOE en las próximas elecciones generales, igual que Gonzalo Caballero, que pidió una «movilización masiva dos progresistas de Galicia» y que recurran al voto útil, personificado en el PSOE. Dijo el líder de los socialistas gallegos que «O PP de Casado representa a incompetencia e a incapacidade, un programa retrógrado e conservador e unha estratexia política orientada pola ultradereita» y acusó al candidato popular a la presidencia del gobierno de ser «un monicreque de Abascal» y de representar un giro ultraconservador.

Gonzalo Caballero alertó de que el Partido Popular pone en riesgo las políticas de bienestar y todo lo que ellas conllevan y acusó a Feijoo de ser cómplice de la «dereita máis rancia de Casado». Cargó también contra el presidente de la Xunta, al que acusó de usar la Xunta para confrontar constantemente con el gobierno central y de mentir sobre las medidas que el ejecutivo de Sánchez adopta en relación a Galicia. «O Consello de ministros cada vez que toma decisións resolve os problemas que Feijoo non consegue atallar, entón este saca unha nova mentira». Se comprometió también el líder de los socialistas autonómicos a que «non haberá un só minuto nin segundo de retraso derivado da acción do goberno de España» en cuanto a la llegada del AVE a Galicia.

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